Con una piel de cordero

Por Humberto Bonanata
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“Los fascistas del futuro se llamarán a sí mismo antifascistas” - Sir Winston Churchill

“Cubra sus bajos instintos con una piel de cordero.
El hábito no hace al monje, pero da el pego.”
- Joan Manuel Serrat (Lecciones de urbanidad)

Era sabido que el discurso de Cristina de Kirchner debía abandonar el ámbito confrontativo que la caracteriza “in péctore” y que lleva el régimen kirchnerista desde hace 10 años 9 meses y 4 días para con sus peores enemigos a quienes sabe nunca logrará conquistar: l
la clase media ilustrada,
los hacedores de la riqueza campesina,
el estudiantado defensor de las libertades
y el empresariado cipayo acompañado por el periodismo infame.

Esa es la verdadera mujer que vimos ataviada de encaje blanco “bajo la piel de cordero” aunque con los mismos odios y resentimientos viscerales que siempre la motorizaron junto con “él” a militar en política contracíclica.

Cuando gobernaba el tercer Perón formaba parte de los “imberbes e inútiles” que tan bien definía su propio creador.
Participaba de la izquierda contestaría de la Universidad de La Plata contra el viejo líder que quería morir en paz en su Patria y dejar la Paz para su Patria…

Echados de la Plaza de Mayo el 1 de mayo de 1974 junto a su “media naranja” decidieron forjar un futuro “cuasi randiano”: el individualismo egoísta por encima de ser social, y el doble discurso como prédica de la solidaridad sólo para la pareja.

Es sabido que tras el golpe del 24 de marzo de 1976, ella y él comenzaron su propia autorrevolución.
La Circular 1050 de Martínez de Hoz les sembró el camino usurario donde el novel abogado y la brillante procuradora amasarían una fortuna merced a la ejecución de los incobrables del Banco Regional Patagónico que, uno a uno, perderían sus propiedades merced a la infame normativa que les impedía escapar de su condena de deudor moroso.

Pasaron muchos años y muchos acontecimientos hasta que el golpe duhalde-moreauista de 2001 –con discurso de ella incluido pidiendo la renuncia del presidente De la Rúa en el Senado de la Nación- hasta el día en que ayer, devenida ortodoxa de la peor cuantía trató de virar su malsano populismo decenal a la ortodoxia tan repudiada en la “dékada ultrajada”.

Por cierto que en “cristilandia” no existe estanflación, violencia social,
caída de reservas acompañada por la pérdida del poder adquisitivo del salario real de los trabajadores, desinversión energética, etc., etc...
Lo único creciente en la Argentina durante el régimen kirchnerista ha sido el narcotráfico,
afianzado en las principales ciudades y suburbios de nuestro país.

Raro que no le echó la culpa a la serie “El patrón del mal” como potenciadora de la narco-psicosis que la mas media argentina comenta a diario.
Por ende, nada pudo decir tampoco de la radarización de sólo el 10% de nuestras fronteras ni del camino de la droga a través de la Ruta Nacional 34.

Trató que su vestimenta emblanqueciera sus entrañas cívicas al criticar los ilegales cortes de calles y rutas por ellos siempre fomentados a través de organizaciones SI.DO.SAS. como “Quebracho”…
¡¡¡Eso no se hace mas… chicos!!! pareció querer decir.

Pero nada dijo que grupos organizados llevaron a casi mil familias indigentes a ocupar el predio de Villa Lugano, perteneciente a la ciudad de Buenos Aires, para extender la Villa 20 e impedir de esa forma la construcción legal de viviendas sociales para aquellos inscriptos en el Instituto de la Vivienda porteño, dispuestos a pagar una suma mensual para obtener una vivienda bien habida.

Expuso sobre el tema Y.P.F. (mientras las cámaras de la TV pública tomaban a un nervioso Oscar Parrilli –miembro informante de la entrega de 1992 y hoy parte de la troupe de la “recuperación) para tratar de justificar que el desaguisado menemista por ellos apoyado, festejado, cobrado y usufructuado,
hoy merecía su “kirchnerización” tal como lo soñaría Antonio Brufau a quien –las malas lenguas infundadas- dicen haberlo visto en la Rambla de Cataluña con una botella de cava (champagne catalán) embebido en el alcohol de los festejos de REPSOL tras la rendición kicillofiana.

Tampoco dijo que el valor libros de YPF-REPSOL antes de la confiscación era de U$S 2.300 millones y que ahora varias generaciones pagaremos los U$S 6.000 millones en bonos garantizados que en 2024 alcanzarán la suma de U$S 10.000 millones.
Menos aún se le ocurrió anunciar una eventual expropiación del 15% en manos del “Grupo Eskenazi”, amigo muy cercano al matrimonio hegemónico, con supuestas vinculaciones cuasi-societarias.

Respecto a la rebelión popular en Venezuela, C.F.K. trató de morigerar su apoyo explícito al régimen de Maduro…
"La democracia es respetar la voluntad del pueblo soberanamente y eso es lo que tenemos que defender porque está directamente vinculada con la paz y la vida", subrayó...

"Nosotros los peronistas no le dábamos históricamente tanto valor a la democracia (...) aprendimos con letra y con sangre que la democracia es una cuestión de paz y de vida", afirmó.

“Trató de quedar bien con Dios y con el diablo”, mascullaba un diputado opositor que se opuso a la confiscación de YPF-REPSOL en 2012.

“Como puñalada trapera cerró su discurso mencionándonos al traidor de Gerardo Zamora como imagen de la concertación plural” criticaba a viva voz un senador radical para quien lo quisiera escuchar…

Salvo que Cristina Fernández parece no conocer el parafrasear popular…
”cada uno es dueño de su propio destino”…

Los políticos supieron soportarla.
Un caballo del Regimiento de Granaderos no aceptó la comparación entre José de San Martín y Néstor Kirchner y murió de un infarto masivo.

El pobre animal era solo eso...
Más nunca un “animal político”.

Humberto Bonanata
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Buenos Aires, Marzo 02 de 2014