Vía Crucis africano: la forma del sufrimiento y del amor

Africa vive un continuo Via Crucis en forma de hambre, pobreza, violencia y muerte.
Para recordar este camino de sufrimiento y de amor, el Secretariado Católico de Lusaka encargó a las Hermanas Clarisas de la diócesis un texto con el significado de las 14 estaciones para la Zambia de hoy, significado que se podría extrapolar a muchos países y regiones del mundo.

Su reflexión aparece recogida en el último número, correspondiente a abril, de la revista Mundo Negro, de los misioneros combonianos, junto a las imágenes del Vía Crucis de la capilla del Noviciado de estos Misioneros en Bauleni, un barrio de la capital zambiana.

Hoy, Viernes Santo, recogemos el texto de este Vía Crucis:

I.- Jesús es condenado a muerte

Miedo a la verdad: Mucha gente es acusada injustamente, torturada, encarcelada y condenada a muerte sin un juicio justo. No tienen voz, nadie los defiende.
¿Cuántos líderes y jueces tienen miedo a la verdad, de perder sus trabajos, condenando a gente que saben que es inocente?.

II.- Jesús carga con la cruz

Insensibles a las injusticias: ¿Cuántas veces los soldados y la policía se aprovechan de su posición para humillar y torturar a gente que cae en sus manos?
La corrupción es rampante en nuestro país.
Nosotros mismos permanecemos insensibles ante estas injusticias.
Miramos sin involucrarnos; no nos atrevemos a hablar de ellas, tenemos mucho miedo a tener problemas si lo hacemos.

III.- Jesús cae por primera vez

Aplastados en el camino: Mucha de nuestra gente está acongojada, no se tiene en pie, empujados fuera de la sociedad, especialmente los que están en paro.
Día tras día pasan horas esperando encontrar trabajo, cualquier trabajo, pero siempre reciben la misma respuesta: “no hay trabajo”.
Así su fuerza se debilita, crecen sus humillaciones, se desesperan, se sienten aplastados en el camino.

IV.- Jesús encuentra a su madre

Solas y sin fuerza: Tantas madres sufren de forma semejante.
Tantas viudas ven que sus hijos pasan hambre, crecen sin haber estudiado, privados de su niñez, sin un futuro y sin dignidad.
Cada mañana se despiertan pensando en lo que el día les ofrecerá; miran a sus hijos y se sienten solas y sin fuerzas.

V.-El Cirineo ayuda a Jesús a llevar la Cruz

Explotados sin escrúpulos: Tantos campesinos en las zonas más apartadas de nuestro país luchan por conseguir algo y no lo logran, son víctimas de la falta de carreteras y de políticas a su favor.
Trabajan enormemente para conseguir cosechas abundantes pero luego no tienen mercados y, a menudo, son explotados por comerciantes sin escrupulos.
Sus escuelas no cuentan con maestros, no tienen centros de salud.
Como Simón, cargan con una pesada cruz.

VI.-La Verónica limpia el rostro de Jesús

Demasiado débil: Ella está ahí como muchos pacientes, demasiado débil para limpiarse: sus vestidos llenos de polvo y su cuerpo llagado.
Está sola, arrinconada para que el olor que desprende su cuerpo no lo noten los demás.
No puede dormir, tiene miedo, su enfermedad se agrava. Un vecino entra, la lava, cambia sus vestidos y le sonríe.

VII.- Jesús cae por segunda vez

Lucha por sobrevivir: Para muchos la vida es una lucha continua por sobrevivir.
Al final del día sus cuerpos están debilitados, sus mentes cansadas y preocupadas. Una de las razones de esta vida miserable es el peso de la inaceptable deuda exterior que padece nuestra nación (dos veces el presupuesto en educación y sanidad)
Esta es una cruz demasiado pesada para poderla sobrellevar.
¿Debemos hacer que nuestros hijos pasen hambre con tal de pagar la deuda?

VIII.- Jesús consuela a las mujeres de Jerusalen

Un lugar peligroso: Se abusa sexualmente de las adolescentes, a menudo delante de nuestros ojos.
Sus familias preferieren mantener en secreto semejantes actos aberrantes, especialmente si suceden en la propia casa.
La familia se supone que es un lugar seguro y, sin embargo, se ha convertido en un lugar peligroso para nuestras hijas.
Las propias madres protegen a los parientes que abusan de ellas.

IX.- Jesús cae por tercera vez

Sin futuro: Muchos niños son abandonados en nuestras calles, expuestos a todo tipo de peligros, desesperados por intentar sobrevivir día tras día.
Muchos de ellos pasan hambre y buscan algo de comer en los basureros.
Parece como si nadie se preocupase de ellos, como si nadie pudiese pagar para que estudien: no tienen ningún futuro.

X.- Jesús es despojado de sus vestidos

Arruinar la creación: Estamos dejando desunada la tierra creada por Dios; se cortan los árboles destruyendo nuestras selvas, sin que tengamos ninguna consideración hacia ellas.
Muchos ríos y aguas están contaminados, y montones de basura desfiguran las ciudades poniendo en peligro nuestra salud.
Seguimos arruinando la maravillosa creación de Dios, le robamos su belleza, y parece que no nos preocupa.

XI.- Jesús clavado en la cruz

Comprar al debil: En nuestra nación casi ocho millones de personas están crucificadas por la pobreza.
Aun así, lo único que buscan algunos es enriquecerse y ser poderosos.
Hacen lo que sea con tal de privar a los pobres de su libertad para hablar, trabajar, ganar su salario y defender sus derechos.
El dinero se ha convertido en su señor, y por eso están dispuestos a “comprar al pobre por un par de sandalias” (Amós, 8.6)

XII.- Jesús muere en la cruz

Pérdida de los nuestros: Mucha gente muere cada día a nuestro alrededor.
¡Los cementerios crecen mucho más rapidamente que las ciudades!
Los ataudes y los tanatorios constituyen un gran negocio.
Nuestras casas, aldeas y ciudades se han convertido en lugares lúgubres, tristes, donde casi diariamente lloramos la pérdida de alguno de nuestros familiares.

XIII.-Jesús muerto en brazos de su madre

Vivos y muertos anónimos: Necesitamos mucho coraje para afrontar la violencias y las muertes que nos rodean.
Nos aterran las muertes inútiles en nuestras carreteras, que podrían evitarse si tuviésemos más cuidado.
Mucha gente no cuenta con los mínimos cuidados médicos que les aseguren una vida decente y larga.
Nuestros barrios se están convirtiendo en tugurios donde la gente vive y muere en el anonimato más absoluto.

XIV.- Jesús es sepultado

Señales de amor y de vida: A pesar de todos estos sufrimientos, penas y muertes, en nuestro país hay señales de amor y vida.
Cristianos, asociaciones e instituciones, mediante su trabajo humilde y servicial, su preocupación por los necesitados y oprimidos, proclaman que Dios es un Dios de vida.
Esta vida divina es lo que la Iglesia de Zambia quiere compartir con toda persona humana.

La Iglesia de Zambia quiere sustituir el mal por el bien, el egoismo por la apertura a los otros, el dolor por la alegría, la muerte por la vida.

El Trastevere
El blog de José Martínez de Velasco