Tras el veto, Macri apunta al blanqueo, las inversiones y la reforma

Busca dar vuelta la página de la ley antidespidos con una agenda variada de temas económicos y judiciales
Mariano Obarrio
LA NACION

Luego del veto a la ley antidespidos, el presidente Mauricio Macri buscará dar vuelta la página y poner el foco en medidas económicas y políticas.
Para salir del debate por el empleo y el ajuste, anunciará el 30 de mayo una reforma política y electoral; tratará de acelerar la aprobación parlamentaria de las leyes del plan Justicia 2020 y de negociar el acuerdo en el Senado de los dos jueces de la Corte Suprema.
Pero la economía está en el centro de la atención de la Casa Rosada.
Por eso buscan apurar el plan de blanqueo y repatriación de capitales, que irá vinculado a una moratoria impositiva, una reforma tributaria y al pago de la Anses a unos 250.000 juicios previsionales en mora.
La amnistía fiscal deberá aprobarse por ley en el Congreso, según confiaron a LA NACION altas fuentes oficiales.

El objetivo es repatriar al menos 20.000 millones de los 250.000 millones de dólares que, se estima, los argentinos tienen fuera del sistema.
Esos capitales deberían redirigirse a inversiones en la construcción, la producción industrial y diversos instrumentos financieros.

La oposición busca en el Congreso mantener la agenda económica como su prioridad
En línea con ese propósito, el Presidente intentará la urgente aprobación de las ya anunciadas leyes de incentivos tributarios a las pymes y de promoción al empleo joven. La urgencia es la creación de puestos de trabajo para dejar atrás el ajuste y la recesión económica.

En la Casa Rosada consideran que las mejoras que se anunciaban para el segundo semestre pueden demorarse más de lo previsto.
Un alto funcionario confió a LA NACION que "la inflación tendrá un freno en la segunda mitad del año" y las "inversiones más rápidas serían en áreas puntuales: agro, minería, y energías renovables (eólica y solar), cuya licitación se lanzó esta semana.

Sin embargo, se descuenta que el grueso de las inversiones productivas, las que logran impacto en el empleo, se pondrá en marcha recién el año próximo.
El propio Macri dijo anteayer al anunciar el veto a la ley antidespidos una frase sugestiva:
"En un año vamos a comenzar a ver los frutos de este camino que hemos empezado a recorrer".
No habló, como antes, del segundo semestre.

La esperanza real para luego de junio próximo es el descenso de la inflación. La reducción de la emisión monetaria del Banco Central, la absorción de más de 100.000 millones de pesos, la reducción del consumo y la recesión comienzan a planchar los precios.
Con menos inflación, el Gobierno espera inversiones.

Lo dijo ayer el ministro del Interior, Rogelio Frigerio:
"Las políticas monetarias tardan entre 10 y 12 meses y por eso el segundo semestre será mucho mejor". La inflación, agregó, empezará "a rondar el 2% y quizá para fin de año sea menor".

El grueso de los capitales y las obras públicas comenzarían a generar empleo a fines de 2016 o entrado 2017, pero el ministro de Producción, Francisco Cabrera, le pregunta a todos los empresarios, al recibirlos, cuánto dinero pueden invertir y cuántos empleos pueden crear.
Si la respuesta es positiva, les pide hacer el anuncio público ante la prensa.

En el plano comunicacional el objetivo de Macri y del jefe de Gabinete, Marcos Peña, será anunciar semanalmente la mayor cantidad de inversiones y obras públicas con el foco puesto en los puestos de trabajo. El plan es generar la expectativa de una pronta recuperación.

El proyecto de repatriación y blanqueo de capitales tiene varios borradores que se analizan entre el ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay; el director de la AFIP, Alberto Abad, y el vicejefe de Gabinete, Mario Quintana. Participan en la discusión Peña, Macri y el secretario legal y técnico, Pablo Clusellas.
No quieren que se cuele el lavado de dinero.
El futuro blanqueo no extinguiría la investigación de delitos.

Para salir del conflicto económico, Macri anunciará la reforma política y electoral con Frigerio y con el ministro de Modernización, Andrés Ibarra, que desarrollará un sistema de boleta única electrónica. El anuncio a toda orquesta se prevé el lunes 30 en el Centro Cultural Kirchner.

Se cambiaría el sistema electoral, se simplificaría y reduciría el calendario de elecciones, se instituiría el debate obligatorio y se regularían las transiciones entre gobiernos.

Macri le ordenó a Frigerio una gestión con gobernadores y senadores para apurar los acuerdos del Senado para Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz como jueces de la Corte.
Participan en la gestión la vicepresidenta Gabriela Michetti, el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, y el titular de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó.

La reforma del plan Justicia 2020 prevé cambios en los fueros federales y penales, así como reformas en las provincias, en el sistema procesal y en el Ministerio Público.
Todos estos proyectos requieren acuerdos en el Parlamento y el Presidente deberá remontar las heridas que dejó el conflicto por la ley antidespidos.