Discriminar
entre lo necesario y lo prescindible puede ser, a veces, un ejercicio
problemático.
En el orden de
lo doméstico, lo ideológico o existencial, la identidad y el criterio de
quien debe definirlo terminan resultando lo decisivo.
¿Acaso
no nos sentimos reducidos en nuestra condición de personas si debemos
subordinarnos a un orden de "necesidades" en términos de subsistencia
biológica?
En
estos días se viene hablando mucho del muro de la frontera de EEUU y México.
Y
entre charla y charla de cafetín, donde un Domingo arreglamos la nación hasta
que llega el Lunes y todo se derrumba, les recordaba que en el mundo se
construyeron muchos muros, que si bien casi todos cayeron, otros no prestan utilidad alguna salvo el Muro de los Lamentos
construido en tierra sagrada (Jerusalén).
Se
conocieron algunos muy famosos como:
La
Gran Muralla China ;el Muro de Berlín (1961 – 1989); el Muro de Adriano (122 –
132)…
Pero
hay otro muro del que muy pocos se alientan o atreven a hablar y que lo podemos denominar el MURO de la
IGNOMINIA, VERGÜENZA y DESHONOR que nos
encierra al cuarenta por ciento de los argentinos desde hace tantos años en la INJUSTICIA;
ILEGALIDAD Y ARBITRARIEDAD, por empresa de la falta de calidad de
nuestra DIOSA JUSTICIA, ya que nos explicaron una historia manipulada (llamada
RELATO) sin enseñarnos a analizar y reflexionar antes de emitir un juicio, concluyendo en señalar que existe una
justicia LEGÍTIMA (y OTRA
ILEGÍTIMA???).
Muro
que tal vez se comenzó a construir en nuestro país con el advenimiento del
Gramscismo en el año 1983 y se fue consolidando gobierno tras gobiernos y aún
no es derribado.
Así
hemos aprendido muy bien que no necesitamos de la autocrítica, porque la culpa
de muchos errores la tienen siempre los mismos, los mismos que aún continúan en las mazmorras inicuas de lo
ignominioso.
Pero
no hemos comprendido, no queremos comprender o no podemos comprenderlo que ese
progresismo SINIESTRO que acarreamos en nuestra historia no es el DESARROLLO
que necesitan los Pueblos sino todo lo contrario:
Es retroceso,
atraso y disminución ya no solo en el ámbito JURÍDICO sino a la vez en lo
EDUCATIVO, SOCIAL y ECONÓMICO del PAÍS degradando al SER HUMANO llevándolo
al SERVILISMO.
Hoy
al existir el sistema del correo electrónico la información es múltiple,
DIVERSO, quebrando lo HEGEMÓNICO y ÚNICO…
Luego
es muy posible que se nos agudice la cultura reflexiva para comprender que debemos hacer caer el MURO de la
IGNORANCIA.
El peronismo K
es el lado más delincuente de nuestra política, con tintes de izquierda
no solo en la comarca sino abarca y abraza al socialismo S XXI que comenzó en
Brasil el galeote LULA DA SILVA.
Los
Argentinos debemos luchar por la verdad, por la independencia de los poderes,
por una Prensa LIBRE, por el orden institucional, por un sistema de votación
limpia y moderna.
Debemos
sacarnos estos delincuentes de encima y dejar de ser un paraje de delincuentes.
La
historia nos enseña que si no cae el telón sobre el pasado nunca habrá unión en
el país.
Y
un país sin la unión de sus habitantes, dentro de la diversidad, nunca será
NACIÓN.
Hay
un país, entero, que espera anhelante y
ávido que actúe DEFINITIVAMENTE UNA FUERZA DE CENTRO DERECHA en
consecuencia.
Con
el RIGOR del tiempo HISTÓRICO que le ocupa.
LA
PATRIA le estará agradecida, pues ese es el camino de la tan deseada UNIÓN
NACIONAL.
"Cuando
el cinismo empieza a ser de mala calidad es hora de decir la verdad" (Bertold
Brecht).
Fernando
Castro Pintos
Presidente
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