BRASIL: Dilma Rousseff presidente

Mis amigas y mis amigos de todo Brasil, mi alegría de estar aquí es inmensa.

Recibí hoy de millones de brasileños y brasileñas la misión más importante de mi vida.

Este hecho, más allá de mi persona, es una demostración del avance democrático de nuestro país: por primera vez una mujer presidirá Brasil.
Ya registro que por tanto, mi primer compromiso después de la elección, honrar a las mujeres brasileñas para que este hecho, hasta hoy inédito, se transforme en un evento natural. Y que se pueda repetir y ampliar en las empresas, en las instituciones civiles, en las entidades representativas de toda nuestra sociedad.

Agradezco mucho especialmente la presidente Lula.
Tener la honra de su apoyo, tener el privilegio de su convivencia, haber aprendido con su inmensa sabiduría, son cosas que se guardan para toda la vida.
Convivir durante todos estos años con él me dio la dimensión exacta de un gobernante justo y del lider apasionado por su país y por su gente.
La alegría que siento por mi victoria se mezcla con la emoción por su despedida.

Sé que un líder como Lula nunca estrá lejos de su pueblo y de cada uno de nosotros.
Tocaré mucho a su puerta y tengo la certeza de que la encontraré siempre abierta.

Sé que la distancia de un cargo nada significa para un hombre de tanta grandeza y tan gran genrosidad.
La tarea de sucederlo es difícil y deasfiante. Pero sabré honrar su legado.

Sabré consolidar y avanzar su obra.

Aprendí con él que cuando se gobierno pensando en los intereses del público y en los más necesitados una inmensa fuerza brota de nuestro pueblo.
Una fuerza que lleva al país al frente y ayuda a vencer los mayores desafíos.

Pasada la eleción es ahora la hora del trabajo.
Pasado el debate de proyectos ahora es hora de unión.
Unión por la educación, unión por el desarrollo, unión por el país.

Junto conmigo fueron elegidos nuevos gobernadores, diputados, senadores.
Al felicitarlos, los convido a todos, independientemente del color partidario, a una acción determinada por el futuro de nuestro país.

Siempre con el convencimiento de que la Nación Brasileña será exactamente del tamaño de aquello que, juntos, hagamos por ella.

Muchas gracias.