"De Argentina para el mundo..."



Caricatura de Alfredo Sabat

lunes, 14 de febrero de 2011

Un árbol florecido de lilas

Por María Teresa Andruetto


El se sento a esperar bajo la sombra de un arbol florecido de lilas.
Paso un señor rico y le pregunto:
- ¿Que hace usted,joven, sentado bajo este arbol, en lugar de trabajar y hacer dinero?
Y el hombre le contesto:
- Espero
Paso una mujer hermosa y le pregunto:
¿Que hace usted, hombre, sentado bajo este arbol, en lugar de conquistarme?
Y el hombre le contesto:
- Espero
Paso un chico y le pregunto; ¡que hace usted señor sentado bajo este arbol, en vez de jugar?
Y el hombre le contesto:
- Espero
Paso la madre y le pregunto:
¿que haces, hijo mio, sentado bajo este arbol, en vez de ser feliz?
Y el hombre le contesto:
- Espero



Ella salio de su casa dispuesta a buscar:
Cruzo la calle, atraveso la plaza, y paso junto al arbol florecido de lilas.
Miro rapidamente al hombre
Al arbol
Pero no se detuvo,
Habia salido a buscar.Y tenia prisa.
El,con una sonrisa, la vio pasar.
Alejarse.
Hacerse un punto pequeño.
Desaparecer
Y se quedo mirando el suelo nevado de lilas.
Ella fue por el mundo a buscar, por el mundo entero.

En el norte habia un hombre con los ojos de agua.
Ella pregunto ¿sos el que busco?
No lo creo. Me voy- dijo el hombre con los ojos de agua.
Y se marcho.
En el este habia un hombre con las manos de seda.
¿Sos el que busco?
Lo siento pero no-dijo el hombre con las manos de seda, y se marcho.
En el oeste habia un hombre con los pies de alas.
Ella pregunto ¿sos el que busco?
- Te esperaba hace tiempo. Ahora no- dijo el hombre con los pies de alas.
Y se marcho.
En el sur habia un hombre con la voz quebrada.
Ella pregunto- ¿sos el que busco?
No, no soy yo-dijo el hombre de la voz quebrada.
Y se marcho



Ella siguio por el mundo,
Buscando
Por el mundo entero
Una tarde subiendo una cuesta, encontro a una gitana,
La gitana la miro y le dijo:
- El que buscas te espera en el banco de una plaza,
Ella recordo al hombre con los ojos de agua.
Al hombre que tenia las manos de seda.
Al de los pies de alas.
Y al que tenia la voz quebrada.
y despues se acordo de una plaza.
Y de un arbol con las flores de lila.
Y de aquel Hombre que sentado a su sombra
La habia visto pasar con una sonrisa.
Dio media vuelta y empezo a caminar sobre sus pasos.
Bajo la cuesta.
Y atraveso el mundo, el mundo entero.
Llego a su pueblo.
Cruzo la plaza.
Camino hasta el arbol florecido de lilas.
Y le pregunto al hombre que estaba sentado bajo su sombra:
- ¿Que haces aqui sentado bajo este arbol?
El hombre que estaba sentado en el banco de la plaza le dijo, con la voz quebrada:
Te espero
Después levanto la cabeza.
Y ella vio que tenia los ojos de agua.
Le acaricio la cara.
Y ella supo que tenia las manos de seda.
La invito a volar con el.

Y ella supo que tenia también los pies de alas...
...
Reflexión de Enrique Casas
Cabe señalar la importancia de la paciencia.
Muchas de las cosas de este mundo, llegan solas, sin necesidad de ir a buscarlas.
Es como sí las mismas, a su tiempo, vinieran a nuestro encuentro

1 comentario:

Anónimo dijo...

Nunca antes un relato puso tanta esperanza en mi, me hizo llorar, llorar de alegría teniendo la certeza de que mi hombre con los pies de alas espera por mi alla en mi pueblo,donde se cruzan los caminos, solo puedo decir .
Gracias