Las colectoras del fraude

Por Humberto Bonanata
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La reglamentación de la ley 26.571 a través del Decreto Nro. 446 desvirtúa el espíritu de la norma emanada del Congreso Nacional bajo el título “De Representación Política y Equidad Social” y acomoda la normativa electoral en miras de asegurar “el fraude no patriótico” del kirchnerismo para el 23 de octubre.

Las palabras del “todólogo” Aníbal Fernández al decir que “las listas de adhesión consolidan el modelo” huelgan mayores críticas en defensa de la pluralidad democrática tantas veces vulnerada en estos ocho años de despotismo populista.
Para ubicarnos en qué sociedad convivimos debemos comenzar con dos temas contrapuestos.

La toma de la Escuela Superior de Comercio Carlos Pellegrini, de la que soy ex alumno y padre y que hoy deshonra el nombre de su estadista fundador en 1890 suplantado ahora por “el bolg del pelle” en el que aparece como sustento ideológico una imagen de León Trostky exigiendo la destitución de sus legítimas autoridades instituidas por el Consejo Superior de la Universidad de Buenos Aires en febrero pasado al acusar entre otras cosas a su actual Rector, Dr. Jorge Fornasari –uno de los pocos actuarios de nota con que cuenta nuestro país- por haber ingresado como profesor en 1976, año de mi egreso como Perito Mercantil y del golpe que dio origen al proceso militar.

Bajo el mismo tenor aunque en otro tema, un Tribunal Oral de La Plata dejó en libertad a un violador de sus hijos de cinco y seis años, condenado a catorce años de prisión por considerarlo “un buen vecino”.

Dos caras contrapuestas de una misma moneda. La sociedad stalinista del kirchnerato que degradó los valores inmanentes que en la facultad de derecho nos enseñara el maestro Carlos Cossio con su axiología de valores. “Cuanto peor mejor” como decía Lenin para destruir los pilares básicos de una sociedad que pretende crecer a la par del mundo civilizado.

Y siguiendo con las mezquindades de entrecasa no sólo las encontramos en el oficialismo sino en la oposición, de la que esperamos despierte en su obligación cívica de salvarnos de la destrucción final de una Argentina que pretende insertarse en el concierto civilizado de naciones y que el régimen impide para llevarnos a la bolsa de gatos rabiosos chapistas llenos de resentimiento.

Mientras que Eduardo Duhalde confiesa haber hecho “un papelón” al suspenderse las elecciones internas del peronismo federal porque Rodríguez Sáa no admitió que en la región del NEA votaran en aquellos poblados menores a 30.000 electores, en los que los trabajadores rurales enrolados con Gregorio “Momo” Venegas hubieran aportado votos a favor del ex presidente, poco se preocupó el gobernador puntano en la denuncia que hiciera el candidato radical a ese cargo, José Riccardo, en los habituales almuerzos del “Grupo Progreso”, fundado y conducido desde hace 22 años por el ex diputado radical José Bielicki, al decir que San Luís es la única provincia argentina que paga a sus empleados con bonos. Algo que confirma que el más crudo conservadurismo de los Patrón Costa fue heredado desde el 4 de junio de 1943 por la demagogia fascistoide del entonces Secretario de Trabajo y Previsión, el Cnl. Juan Perón.

Y por el lado del radicalismo podemos observar que el principal candidato presidencial, Ricardo Alfonsín, hace oídos sordos a sus contertulios de su entorno como Gerardo Morales que quieren cerrar un pequeño acuerdo con el socialismo y con el G.E.N. de Margarita Stolbizer dejando de lado la amplitud que proponen Cobos y Sanz de acordar con el peronismo federal y el PRO para no sólo asegurar el triunfo en la Capital Federal, con la fórmula Macri-Silvana Giúdici sino afianzar los logros de Francisco de Narváez de 2009 para que ahora sea acompañado por Stolbizer en la fórmula bonaerense. Gran parte de esta tejeduría electoral desde el silencio del poder, la oposición se la debe al “hacedor de acuerdos” Enrique “Coti” Nosiglia.

El “Coti”, íntimo amigo de Macri, le habría dicho a Mauricio que sin julio no hay octubre. E
s decir que si Macri pierde el 31 de julio en el ballotage en el que Solanas acompañará seguramente a Daniel Filmus, pocas serán las posibilidades de la oposición de triunfar no sólo el 23 de octubre sino en la fundamental segunda vuelta de noviembre, hasta ahora representada por Cristina Kirchner que no sabe cómo evadir el compromiso que sus amigos del núcleo “reelección o cárcel” tratan de imponerle a pesar de la negativa de sus hijos y de la profunda depresión que estaría soportando por la ausencia de su guía político-espiritual y por la constante cercanía de roedores que dependen de ella para no terminar entre rejas a partir de 2012, Carlos Menem incluido.

Tanto Macri como Nosiglia tienen en claro que la elección porteña potenciará al futuro triunfador de octubre. Y que si Mauricio no pone el pecho en julio ninguno de sus delfines soportaría triunfalmente en ballotage ante Filmus y todo el “arco progre” kirchnerista anti-macri-.

Parecen simples relatar los hechos desde un teclado pero difícil es amalgamar los egolatrismos opositores para que se den cuenta que si no afianzan una colación, octubre será tarde para lágrimas.

Una encuesta de la semana pasada lo dice todo.
Hoy día Cristina Kirchner, ponderados los indecisos, alcanzaría el 42,8% a pesar que la oposición no cuenta con candidatos uniformes.
Segundo aparece Macri con 28% y Ricardo Alfonsín con 27%.

Creemos que la respuesta es obvia: desunidos perdemos…
¿Por qué no nos juntamos para cambiar la Argentina?

De ellos depende.

Y de nosotros depende forzarlos a definirlos.

Humberto Bonanata

Buenos Aires, Abril 17 de 2011