"De Argentina para el mundo..."



Caricatura de Alfredo Sabat

sábado, 25 de junio de 2011

Centro de Estudios Regionales             Informe Nº2860611

No me preocupa el grito de los violentos, de los corruptos, de los deshonestos, de los sin ética. Lo que más me preocupa es el silencio de los buenos.- Martin Luther King
Una nueva vergüenza  Nacional
Ahora el mundo dice que lavamos dinero

Nuevamente Argentina envuelta en un escándalo de trascendencia internacional, y nada menos que relacionado con el lavado de dinero y el incumplimiento de las normas a las que nos comprometimos. Es que ahora nos enteramos que los integrantes del Grupo de Acción Financiera (Gafi) incorporará al país a la lista gris junto a Corea del Norte, como integrante que ha incumplido las recomendaciones de combatir el Financiamiento  del Terrorismo y el Lavado de Dinero. Esta sanción seguramente operara como valla restrictiva a las inversiones y a la interrelación financiera con otros países.
Recordemos que el GAFI está integrado por 33 países u organizaciones regionales: Alemania, Argentina, Australia, Austria, Bélgica, Brasil, Canadá, la Comisión Europea, Dinamarca, España, EE.UU., Finlandia, Francia, Grecia, el Consejo de Cooperación del Golfo Pérsico, Hong Kong, China, Islandia, Irlanda, Italia, Japón, Luxemburgo, México, Holanda, Nueva Zelanda, Noruega, Portugal, la Federación Rusa, Singapur, Sudáfrica, Suecia, Suiza, Turquía y el Reino Unido.
En las reuniones participan además observadores y organizaciones  internacionales como el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional, Interpol y Europol, las Naciones Unidas y la Organización para la Cooperación Económica y el Desarrollo (OCDE).
Cada periodo de sesiones es anual, de julio a junio, y la presidencia es rotativa, cada año corresponde a uno de sus miembros. España lo presidió de julio de 2000 a junio de 2001.
En el momento de su creación el G-7 lo integraban: Estados Unidos, Japón, Canadá, Italia, Francia, Reino Unido y Alemania, y como observadores participaron Austria, España, Suiza, Suecia, Holanda, Bélgica, Luxemburgo y Australia.
Desde 1999 nuestro país integra el denominado G 20. El Grupo de los 20, o G-20, es un foro de 19 países, más la Unión Europea, donde se reúnen regularmente, desde 1999, jefes de Estado (o Gobierno), gobernadores de bancos centrales y ministros de finanzas. Está constituido por siete de los países más industrializados (G-7), más Rusia (G-7+1 o G-8), más once países recientemente industrializados de todas las regiones del mundo, y la Unión Europea como bloque económico.
Es un foro de cooperación y consultas entre los países en temas relacionados con el sistema financiero internacional. Estudia, revisa y promueve discusiones sobre temas relacionados con los países industrializados y las economías emergentes con el objetivo de mantener la estabilidad financiera internacional, y de encargarse de temas que estén más allá del ámbito de acción de otras organizaciones de menor jerarquía.
Para poder desarrollar su tarea el G20 tiene una organización compuesta de distintos grupos de asesoramiento como es el que nos ocupa en esta oportunidad y se trata del denominado GAIF, el que en la presente semana se encuentra deliberando en México. El Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) incluirá en los próximos días a la
Argentina en su "lista gris" de países que presentan  serias deficiencias técnicas.  Así lo hicieron saber personas  vinculadas con las negociaciones.
La decisión del principal del  foro intergubernamental de prevención y lucha contra el lavado se oficializará durante el plenario del GAFI.
Los gobiernos más críticos de la Argentina, entre los que se destaca el de EEUU, analizan incluso plantear que el país debe descender aún más, hasta el último escalón de la "lista negra", junto a Irán y Corea del Norte e incluso hasta pedir la suspensión de su membrecía, basados en que viene incumpliendo desde hace años 47 de los 49 parámetros de evaluación general
La lista incluye, además, quejas contra la Unidad de Información Financiera de nuestro país (UIF) y el uso político que el gobierno kirchnerista ha hecho del organismo que debe controlar el lavado de dinero.
La tensión imperante provocó fuertes discusiones durante la sesión preliminar del "grupo de revisión especial" para la región -en la jerga, "ICRG América"-, en Perú. Allí, la delegación argentina presidida por el embajador y experto en normativas antilavado y contra la corrupción, Eugenio Curia, se cruzó con Canadá, que copreside ese grupo regional que intentó incluir un párrafo en la revisión del país, en la que exponía la falta de compromiso político en la materia.
Los representes criollos dicen que esa visión es inexacta. "… la situación está mal. Pero si se analiza la evolución, el sistema argentino repuntó muchísimo durante el último año y el compromiso contra el lavado del Gobierno y de la oposición llevó a que se aprobara una la  antilavado en pleno año electoral", por su parte el  foro regional, Gafisud, se muestra más flexible a la posición argentina.
El titular de la Unidad de Información Financiera (UIF), José Sbattella, en tanto, viajó a Ciudad de México la semana pasada para abrir las negociaciones y observar el panorama que se presenta hostil hacia nuestro país.
Sbattella recordó que… "Se acordó un plan de acción con pautas y plazos concretos, y se nos pidió que para México tuviéramos sólo la media sanción del proyecto de ley contra el lavado y encaminado para octubre otro sobre financiamiento del terrorismo, y nosotros fuimos mucho más allá", argumentaron.
Desde la delegación oficial replican que la inclusión en la lista gris no debería interpretarse como una "sanción en sí", sino como "una etapa dentro de un procedimiento de revisión y corrección de las deficiencias" del sistema antilavado local. En la lista gris, hoy figura otro país miembro del G-20: Turquía. También aparecen Grecia, Venezuela, Ecuador, Honduras, Nicaragua, Paraguay y Bolivia, aunque los dos últimos afrontan horizontes muy distintos. Paraguay podría salir de la lista por las mejoras en su sistema y Bolivia descendería al listado negro.
La Argentina se encuentra a mitad de camino, según quien analice su caso. "En febrero se evitó el desastre histórico de la Argentina siendo incluida en la lista negra junto a Irán o Corea del Norte mediante un proceso acelerado. Pero el resto de la discusión y de los reclamos continuó", comentó uno de los interlocutores al tanto de las negociaciones.
Pero mientras todo esto sucedía fuera de nuestras fronteras, aquí en Argentina la Sra. Presidente anunciaba su reelección y la corte de aduladores aplaudía, la oposición se enteraba que una vez más el poder en las sombras, antes atribuido a Néstor Kirchner, se encargó de vetar uno de los principales artículos de la “Ley Antilavado”.
La oposición estalló de ira  en el Congreso al conocer el decreto de Cristina Fernández de Kirchner que promulgó la ley antilavado vetando uno de sus artículos: el que le prohibía a la UIF actuar como querellante en las causas de supuesto lavado.
La cuestión no es menor: con esa decisión la Presidente violó el acuerdo parlamentario que le había permitido al Gobierno lograr el quórum y sancionar la ley antilavado a tiempo para llevarla a la Asamblea del GAFI que comienza a sesionar hoy en México e intentar así esquivar una sanción de ese organismo.
La decisión fue publicada ayer en el Boletín Oficial junto con la promulgación de la Ley 26.683 a través del decreto 825. El artículo 25 de la norma establecía que la UIF no podía “constituirse como parte querellante en procesos penales” vinculados a casos de lavado de dinero.
Pero el Gobierno ahora consideró que es  necesario  que el organismo encabezado por Sbatella esté facultado para  intervenir como querellante en procesos en los que se investiguen delitos tipificados por la Ley 25.246 y sus modificatorias.
Las miserias de la delegación (La audiencia se hará en español)
Viejo anhelo y reclamo del titular de la Unidad de Información Financiera (UIF), José Sbattella, la discusión sobre el "caso argentino" que celebrará el GAFI será en español. De este modo, Sbattella ya no deberá lidiar con el inglés ni con el francés, con el que se defendió hasta ahora.
CONCLUSIONES
• La situación que afrontará la delegación es aún incierta. En los anteriores encuentros, en octubre y febrero, la línea dura incluyó a España, México, Noruega y Francia, entre otros, pero EEUU logró apaciguar los ánimos y evitó que el proceso se acortara en perjuicio de la Argentina, posibilidad que carecía de antecedentes históricos dentro del GAFI.
• Pero hoy el panorama cambió ya que el gobierno de Barack Obama endureció su posición, a medida que el incidente del avión militar decomisado en Argentina en febrero último y el pésimo manejo diplomático y las bravuconadas de nuestros funcionarios  empantanaron  las relaciones bilaterales. 
• En simultáneo -pero sin que quedara en claro si como efecto de aquello-, desde el Departamento del Tesoro y la unidad antilavado norteamericana (FinCen) dejaron trascender que verían con buenos ojos aplicar una sanción "ejemplificadora" con la Argentina. Será esto casualidad o estará relacionado con aquella creencia de que los elefantes (EEUU) tienen muy buena memoria y no olvidan los desaires que le propinamos una y otra vez.
• Las delegaciones más críticas, sin embargo, objetan otros ejes. Entre otros, consideran que no está claro si la UIF Argentina posee facultades sancionatorias y de reglamentación, y hasta plantean dudas sobre la vigencia actual de la figura del encubrimiento del artículo 277 del Código Penal para el lavado. Eso podría conllevar que algunos países emitieran alertas para sus sistemas financieros sobre los riesgos de operar con la Argentina, en línea con lo que ya ocurrió tras el plenario de febrero en Alemania e Inglaterra, con el consiguiente aumento los costos transaccionales y los requisitos burocráticos en el comercio internacional desde y hacia la Argentina, entre otras secuelas.
• Por último digamos que el lavado de dinero es un serio problema, que perjudica no sólo a una nación sino también a todo el mundo, dado el volumen asombroso de este delito trae como consecuencia: La corrupción, distorsiona la toma de decisiones económicas, agrava los males sociales y amenaza la integridad de las instituciones financieras.

Antecedentes
El Grupo de Acción Financiera Internacional sobre el blanqueo de capitales (GAFI) es un organismo intergubernamental cuyo propósito es el desarrollo y la promoción de políticas, en los niveles nacional e internacional, para combatir el lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo.
Fue establecido en 1989 por el G7, y en abril de 1990 dio a conocer sus Cuarenta Recomendaciones, que proveen un diseño de la acción necesaria para luchar contra el lavado de dinero. Las mismas fueron revisadas en 1996 y reformuladas sustancialmente en 2003 para reflejar los cambios en las tendencias del lavado de dinero y anticipar futuras amenazas.
En 2001, se emitieron las 8 Recomendaciones Especiales para combatir el Financiamiento del Terrorismo, que fueron complementadas en octubre de 2004 con la emisión de la 9º recomendación especial referida al movimiento transfronterizo de efectivo.
La sede del organismo está en París, y su estructura incluye Grupos de Trabajo y Plenario. En los Grupos de Trabajo se encuentra el de Tipologías, Lavado de Dinero y Financiación del Terrorismo, entre otros. Las reuniones tanto de los grupos de trabajo como del plenario son tres veces al año.
El GAFI emite recomendaciones, evaluaciones mutuas de países, “follow up” seguimientos, y sanciones; además de proveer capacitación para sus miembros.
Existen grupos regionales tipo GAFI/FATF, entre ellos el GAFISUD, que reúne a estados miembros de América del Sur y México.
El GAFISUD es una organización intergubernamental de base regional que agrupa a los países de América del Sur y México, creada en el año 2000, en Cartagena de Indias, Colombia. Tiene personalidad jurídica y estatus diplomático en Argentina, y su sede está en la Ciudad de Buenos Aires, Argentina. Sus miembros se reúnen 2 veces al año donde sesionan sus Grupos de Trabajo y su Asamblea Plenaria.
El GAFISUD adhiere a las 40 y 9 Recomendaciones del FAFT-GAFI, y entre sus objetivos se encuentra el de conseguir que las legislaciones de sus miembros sean consistentes con una política global completa para combatir el delito de lavado de activos y financiación del terrorismo. Promueve también, una actuación integradora de los aspectos legales, financieros y operativos y de todas las instancias públicas responsables de esas áreas.
El GAFISUD promueve:

 La tipificación del delito de lavado, proveniente de delito grave.
 Un sistema de prevención del delito que obliga al sistema financiero a “conocer al cliente y reportar operaciones sospechosas”.
 Sistemas legales para perseguir eficazmente el delito en las fases de investigación y en el proceso.
 El desarrollo de la cooperación entre Estados para la investigación y persecución del delito. 
Los objetivos del GAFISUD son:

 Combatir el lavado de dinero y la financiación del terrorismo, a través del compromiso de mejora continua de las políticas nacionales contra ambos temas, y la profundización de los distintos mecanismos de cooperación entre los países miembros.   Además, presta colaboración técnica y organiza capacitación.   

No hay comentarios: