“Hace 10 años lanzábamos piedras, ahora estamos lanzando cohetes y satélites”

La otra parte de la historia no contada...
FÁBRICA MILITAR DE AVIONES 
FUERZA AÉREA ARGENTINA
Por Arnaldo José Guevara  / INFORMADOR PÚBLICO

Intentando complementar el hermoso trabajo del Ing. Roberto Eláskar, me siento obligado a decir lo siguiente:

Me llamo Arnaldo José Guevara, nací en Diciembre de 1940.
Comencé a trabajar a los doce (12) años como cadete en una farmacia, además de estudiar paralelamente mi ciclo primario.
Ingresé a la Fuerza Aérea Argentina el 25 de Febrero de 1955 en la Escuela de Aprendices de la Fábrica Militar de Aviones.
¿Usted sabe, Sra. Presidente, de qué se trata? 
Yo le cuento, Sra.
La Fábrica Militar de Aviones "fue madre de fábricas", de sus talleres y aulas salieron los Ingenieros, los técnicos y los operarios que nutrieron todas la industrias que se desarrollaron en la provincia de Córdoba: KAISER Argentina, Fiat Concord, Thompson Ranco, Forja Argentina, Fiat Materfer, Fábrica de Motores Perkins Diesel (Donde había funcionado la Fábrica de Tractores PAMPA) y todo taller privado en sus diversas especialidades de la Metalmecánica, de Galvanoplastia, Tratamientos Térmicos, Baños Electrolíticos, etc. etc. etc.

En el año 1962 bajo las órdenes del entonces Capitán Ing. Juan Manuel Beverina y del Dr. Guillermo Salado Araoz comencé a trabajar en una tecnología inédita para el país: LOS PROPULSANTES SÓLIDOS COMPUESTOS.
Todo en paralelo a lo que el Ing. Roberto Elaskar (h) le comenta.
En ese laboratorio (Pabellón 62 de la Fábrica Militar de Aviones), comenzó a crecer a través de los años. Sucesivamente el ente rector fue transformándose de Instituto Aerotécnico a Instituto de Investigaciones Aeronáuticas y Espaciales (IIAE) 
En su seno fue creciendo la División Propulsión, conducido sucesivamente por el Brigadier Miguel Sánchez Peña, por el Comodoro Ing. Aldo Zeoli, por el ya mencionado Cap. Juan Manuel Beverina, por el Brigadier Oscar Julia, Brig. Carlos Stahl, Comodoros Raúl Pedro Flores y Luis Cueto. Comodoro Ing. Ricardo Maggi, Ingenieros Armando N. Oldani, Alfonso César Suárez, Carlos Cavallini, Dr. Ing. Hugo Ginés De Paco, Ing. José Francisco Núñez, Quim. Eduardo Spechialle y un numeroso listado de nombres (mil perdones por no mencionar a todos) que inscribieron la historia aeroespacial del país, con su fecundo trabajo.

En el año 1971 el 10 de Octubre, se fundó la Planta Piloto de Propulsantes Sólidos, cuyo primer Director fue el Brigadier Oscar Julia, dependía de la Dirección del IIAE.

De los laboratorios y talleres del IIAE salieron los propulsores nacionales de los Cohetes Dardo de Investigación Meteorológica DIM, el propulsor ANTARES de los cohetes TAURO I y II con el que realizaron importantes estudios sobre recursos naturales (entre otras cosas) los Cohetes Clag. I y Clag II, para la lucha antigranizo.
De la performance de esos propulsores existe abundante bibliografía.
Pero la Planta Piloto Sra. Presidente, no fabricaba "piedras" además de lo mencionado, se trabajaba en sus laboratorios con explosivos, pólvoras y pirotecnia de aplicación militar, etc.

Desde los estudios y trabajos realizados en la PLANTA PILOTO nacieron la Fábrica de Armamentos, la Fábrica de Bombas y una buena parte del mantenimiento del material de Fuerza Aérea.
¿Sabe por casualidad, Sra., la gran cantidad de gente que estuvo implícita, en estas actividades?
Por supuesto que no, vaya mi pretensión.
Indudablemente Sra. no eran fabricantes de PIEDRAS.
Por favor, no diga esas cosas porque esta menoscabando injustamente a su propia PATRIA y está faltando el respeto a varias generaciones de Investigadores y Científicos.
Dentro de su cerrado círculo de colaboradores que hablan con mucho desenfado; tengo la certeza de no haberlos visto nunca por esos lugares.

Puede Ud. dignarse en leer el libro escrito por el Ing. Pablo de León: “HISTORIA DE LA ACTIVIDAD ESPACIAL EN LA ARGENTINA”
Allí puede encontrar (resumido) algo de todo lo que se hizo y quienes lo hicieron.
Quienes fueron y son hoy referentes insoslayables y es un delito de soberbia ignorarlos.

Trabajé en la Fuerza Aérea Argentina durante cuarenta y tres (43) años.
Trabajé también en el Dto. Aeronáutica de la Facultad de Ciencias Exactas Físicas y Naturales, Universidad Nacional de Córdoba (directores Ing. José F. Eláskar (padre) Ing. Alfonso César Suárez e Ing. Magallanes, Ing. Armando Oldani, Ing. Carlos Cavallini, entre otros, en trabajos de Investigación y Desarrollo: Propulsantes Híbridos y otros trabajos relacionados, Encendidos Hipergólicos, ¿sabe Ud. qué es eso? - Cohete antigranizo, etc.


¿Sabe Ud. de qué se trata?
No se hacían piedras, Sra.

Dios me bendijo, porque tuve la inmensa suerte de haber vivido a pleno esa etapa de esplendor.
Desde lavar un vaso de precipitado o limpiar el piso del laboratorio hasta diseñar un propulsor, fui creciendo a través de loa años.
¿Sabe Ud., Sra., qué es un propulsor?

Un propulsor es lo que hoy sus conspicuos y atentos servidores, (cuidado además son mentirosos); tratan infructuosamente de hacer volar un cohete y su propia soberbia les impide ver todo el panorama y recurrir con modestia a quienes hicieron algo sobre el tema, buscando consejos.


¿El ocultamiento, la mentira, Sra. se han adueñado del país?
La poca memoria y la audacia hacen que el Tango “CAMBALACHE” sea hoy más vigente que nunca dentro de su entorno.

Tengo ya setenta (70) años y he caminado algunos países de la América Latina (y no de turista) y he sufrido la vergüenza que exhibe la imagen de mi país.
En la Feria del Libro de Abril del 2010 un premio Nobel dijo que había sido para él la Argentina.

Con ciudadanos anestesiados (sus prosélitos) que ha cambio de recibir indignas dádivas permiten que Ud. Sra. siga gobernando.
Por suerte no son todos.
Aparte de martirizar a mis compatriotas con sus inapropiados discursos, su ex ministro de defensa la Dra. Nilda Garre tiene mi CV.
SINPRODE 2009 porque en algún momento abrigue la utópica esperanza de volver al país.
Querer volver no implica que a uno lo traten mal en donde este, sino que siempre se lleva en fondo un profundo deseo de ser ÚTIL a su país.

Sra. "No me gusta el verso", ni en mi boca, ni en la boca de ninguno de los funcionarios de turno.

¿Sabe Ud. por qué me fui del paraíso de los derechos humanos?

Porque las inteligentes y/o sospechosas políticas económicas aplicadas por sabios y conspicuos ecónomos recibidos en Harvard University decidieron confiscar los ahorros de sus compatriotas.
Su país, mi país, Sra., me dejó en la calle...
Mejor dicho, los gobiernos elegidos por y para el pueblo; luego de haberle servido desde mis doce (12) años, hasta mi retiro voluntario en septiembre del año 2000.
Sin embargo, Sra., seguí trabajando como docente en la Fuerza Aérea, hasta el año 2005, en donde la política del Estado me llevó irremediablemente a buscar afuera lo que mi propio país me negaba.

¡Cuidado, Sra.!, no vaya a creer que esto es un hecho aislado.
¿Nunca se puso a pensar en toda la cantidad de gente que perjudicó la política del Estado?
En muchos casos pagaron con la vida el desatino de los “sabe lo todo”...
Esos si tiraron piedras Sra.
¿Que hicieron los paladines de los derechos humanos; para subsanar desmesurada injusticia?
NADA
Luego salimos al mundo rindiendo homenajes hipócritas a personas que en su momento no se las respetó. Ud. misma salió a un país hermano a pedir “perdón” por los desatinos de un presidente (Síganme que no los defraudaré) que aparte de dejarnos con las manos vacías en lo interno, nos lleno de vergüenzas en el mundo, enajeno el petróleo, privatizo muchas empresas con convenios y contratos sospechosos (ejemplo LOCKHEED MARTIN AIRCRAFT).
Como garante de PAZ vendió armas a países en litigio.
Se jacto de ser aliado de los Dioses USA (las relaciones carnales).
Sin embargo, hoy goza impune de sus fueros de senador.
Todavía se sigue sin aclarar el desastre de la Fábrica Militar de Rio IIIº y los asesinatos consecuentes.

Sabe Sra. todo lo que he vivido, por supuesto mucho más que Ud. sin embargo eso nunca lo esgrimí para ofender, calumniar, mentir y decir “sandeces”
Ese discurso prepotente es un común de los ineptos que hubo y que hay en el país.
Un país de corrupción oficial manifiesta, propenso a la venganza y no a la justicia.
Demuestre que no está dentro de ese círculo, pero no hablando cosas inoportunas.
¿Por qué se hace cómplice de las personas que miran más para afuera? 
Porque vender la Patria es una costumbre muy antigua y es lo primero que se aprendió lamentablemente. ¿Estudió Ud. la Historia Argentina?, me imagino que sí, porque para poder ser presidente hay que conocer muchas cosas de un país.

Sra. Presidente: si Ud. no hace un extenso examen de conciencia y rectifica sus discursos y su política, porque de otro modo la realidad terminará dándole la razón: terminaremos tirando piedras...
Pero no hacia arriba, sino nos apedrearemos entre nosotros.

Es mucho lo que se puede decir de la realidad, es casi cotidiano observar el descontento de la gente.
Para ser sinceros: ¿puede decir por qué protestan?
Algunos es porque quieren tener derechos NUNCA adquiridos.


¿Quién fue o qué fue lo que los lleva a ese proceder?
Su jefe espiritual decía desde los balcones de la Rosada: TRABAJAR, TRABAJAR, TRABAJAR...
¿Y Ud. qué aprendió?: SUBSIDIO, SUBSIDIO, SUBSIDIO.
Un modo elegante de decir COMPRAR.
Y no me venga por favor; con las palabras: ayuda humanitaria.
Es indigno vivir de la mendicidad.
La gente necesita Trabajo, Estudio, Asistencia Social.
Uno debe recordar: una Nación Socialmente Justa, Económicamente Libre y Políticamente Soberana.

El país es muy grande, Sra. Ud., como presidente, ¿conoce todos sus rincones? 
Porque conocer todo es su deber y responsabilidad.
 ¿Nunca se puso a pensar en el porcentaje de votos que saco cuando la eligieron y más que eso, nunca pensó en el porcentaje de los que no la votaron?
¿Ahora les pasamos la “boleta” porque los consideramos terroristas foráneos?

Para los seres inteligentes un ejemplo basta...
Para los “vedados” (obviemos caritativamente: los mal intencionados) nada es válido.
Para los autoritarios que llevan implícita en su persona prepotente, la ineptitud y la soberbia, no puede entrar la razón, ni el sentido común y esto nos llevará irremediablemente a la injusticia y a la ruina.

No conozco ni soy amigo del Ing. Elaskar (h), pero si conocí y trabajé con su padre, en la Fuerza Aérea y en la Universidad Nacional de Córdoba.
Pero no le quepa ninguna duda que me solidarizo totalmente con sus palabras.
Lo que digo está total y moralmente sustentado en la realidad y la memoria de mis padres: "No me permitirá nunca mentir y deformar los hechos.
El respeto por mis antiguos Jefes, maestros, colegas, amigos, familiares y alumnos... no me permitirán jamás la mentira.

SI a la Justicia, NO a la venganza.
SI a las Reivindicaciones, SI a la Verdad,
SI a la Honestidad.
El que calla otorga y en el silencio está implícita la COMPLICIDAD... 
En la Ignorancia... en la soberbia... en la injusticia... esta implícita...
la CORRUPCIÓN... y la DESVERGÜENZA.

Ha sido un gusto poder decirle todo esto a Ud., y no lo digo por mí únicamente.
Lo digo por todos aquellos a los cuales se los amarra con la AMENAZA o por otros motivos que pueden ser inconfesables... ¿por qué no pueden hablar con total LIBERTAD?

Todo lo que aquí manifiesto es únicamente mi responsabilidad...
Y adonde corresponda, si es necesario, afrontaré las consecuencias...
Con la verdad, no ofendo ni temo... dijo alguien por ahí.


ARNALDO JOSE GUEVARA
Argentino, mayor de edad, dueño de mis actos, de mi raciocinio, dueño de mi mente... y perfectamente imbuido de mi responsabilidad... digo que en el país de los DERECHOS HUMANOS, entre muchos más, me dejaron sin poder disfrutar lo que en mi vida de trabajo pude cosechar.
Vi la caída lastimosa de nuestros mejores logros.
Sin robarle a nadie... sin perjudicar a nadie... y respetando siempre a los que de alguna manera me ENSEÑARON a estudiar, a trabajar, dejar de lado la mentira.
En honor a todos ellos, vaya esta MI REPLICA a sus desafortunadas palabras.

Si Ud. piensa que le arrojo piedras...
No olvide que la frase la acuñó Ud.
Y que muchos argentinos tienen implícito
en sus mentes y corazones 
el agravio injusto de su FRASE.


Arnaldo J. Guevara