"No mirais aquel mendigo
De aquella iglesia á la puerta,
Cuya miseria despierta
Simpática compasión;
Y que á todos los que pasan
Tendiendo mano transida,
Pide con voz dolorida
¡Una limosna por Dios!
De aquella iglesia á la puerta,
Cuya miseria despierta
Simpática compasión;
Y que á todos los que pasan
Tendiendo mano transida,
Pide con voz dolorida
¡Una limosna por Dios!
Es un mártir de la patria,
Un soldado valeroso
Del estandarte glorioso
Que el hemisferio cruzó;
Hizo temblar al guerrero
Y que hoy pide al pasajero
¡Una limosna por Dios!
Un soldado valeroso
Del estandarte glorioso
Que el hemisferio cruzó;
Hizo temblar al guerrero
Y que hoy pide al pasajero
¡Una limosna por Dios!
Ved: en su manga derecha
Se perciben dos galones,
Y de Maipú los cordones
Que la patria le donó:
Cabo inválido sin brazo,
Sólo le resta en la tierra
Pedir después de la guerra
¡Una limosna por Dios!
Se perciben dos galones,
Y de Maipú los cordones
Que la patria le donó:
Cabo inválido sin brazo,
Sólo le resta en la tierra
Pedir después de la guerra
¡Una limosna por Dios!
A la puerta de la Iglesia
Rememora sus hazañas,
Y las gloriosas campañas
Que en otros tiempos siguió;
Y mostrando con orgullo
De su frente una ancha herida,
Pide con voz dolorida
¡Una limosna por Dios!
Rememora sus hazañas,
Y las gloriosas campañas
Que en otros tiempos siguió;
Y mostrando con orgullo
De su frente una ancha herida,
Pide con voz dolorida
¡Una limosna por Dios!
Fuí soldado de los Andes,
En Maipú cabo me hicieron
Y las balas deshicieron
Mi brazo en Ituzaingó:
Entonces mi voz se oía
En medio del fuego recio
Y hoy me arrojan con desprecio
¡Una limosna por Dios!
En Maipú cabo me hicieron
Y las balas deshicieron
Mi brazo en Ituzaingó:
Entonces mi voz se oía
En medio del fuego recio
Y hoy me arrojan con desprecio
¡Una limosna por Dios!
¡De frente! ¡A la bayoneta!
El coronel nos gritaba,
Y sin miedo nos llevaba
A la boca del cañón.
Al brazo el arma llevaba,
Metralla y bala llovía,
Y entonces yo no pedía
¡Una limosna por Dios!
El coronel nos gritaba,
Y sin miedo nos llevaba
A la boca del cañón.
Al brazo el arma llevaba,
Metralla y bala llovía,
Y entonces yo no pedía
¡Una limosna por Dios!
Cuantas veces en los Andes
Al venir la madrugada,
En medio de una nevada
Mi bigote enblanqueció.
Hoy la nieve de los años
Mi cabello ha encanecido,
Y extiendo la mano y pido
¡Una limosna por Dios!
Al venir la madrugada,
En medio de una nevada
Mi bigote enblanqueció.
Hoy la nieve de los años
Mi cabello ha encanecido,
Y extiendo la mano y pido
¡Una limosna por Dios!
¿Dónde están mis camaradas
Del Cerrito y Ayacucho,
Que mordían el cartucho
Con indomable valor?
¿Dónde están? tal vez ahora
Duermen en la tumba helada
O piden con voz quebrada
¡Una limosna por Dios!
Del Cerrito y Ayacucho,
Que mordían el cartucho
Con indomable valor?
¿Dónde están? tal vez ahora
Duermen en la tumba helada
O piden con voz quebrada
¡Una limosna por Dios!
Como ellos yo moriré,
Y en la tierra de mi fosa
¿Que alma verterá piadosa
Una gota de dolor?
Y cuando en algún camino
Bajo los años sucumba
¿Quién dará para mi tumba
Una limosna por Dios?
Y en la tierra de mi fosa
¿Que alma verterá piadosa
Una gota de dolor?
Y cuando en algún camino
Bajo los años sucumba
¿Quién dará para mi tumba
Una limosna por Dios?
Cesa, cesa en tus lamentos
Cabo lleno de laureles,
Que hay olvidos más crueles
Que los que llora tu voz:
La República Argentina
Bajo el yugo de un tirano
Pido al mundo americano
¡Una limosna por Dios!"
Cabo lleno de laureles,
Que hay olvidos más crueles
Que los que llora tu voz:
La República Argentina
Bajo el yugo de un tirano
Pido al mundo americano
¡Una limosna por Dios!"
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