"De Argentina para el mundo..."



Caricatura de Alfredo Sabat

jueves, 7 de mayo de 2020

Si no nos pueden llevar a la chavización,


no será por el esfuerzo del sector político, sino por la resistencia social al cristinismo más radicalizado
Por: Rubén Lasagno
El coronavirus, implica mundialmente un cambio de paradigma social, laboral, económico y ambiental, entre otros aspectos que se modifican con y tras la pandemia y las acciones emprendidas para resguardarse del contagio masivo.

Los países serios, con gobernantes conscientes, honestos y estadistas, adoptan comportamientos diferenciados en situaciones anómalas, sin embargo y precisamente por esa raíz de honestidad que acarrean desde su cuna o la aplicación de transparencia con la cual entienden la función pública, las medidas “excepcionales” que instrumentan en crisis del mismo carácter (y ésta es una de ellas) son de corto plazo, sobre un hecho puntual, buscan una salida rápida y urgentemente pugnan por la normalización de las instituciones como forma de garantizar, precisamente, los mecanismos democráticos que han sido alterados en la contingencia.

En Argentina, la clase política en general y el peronismo/cristinismo/kirchnerismo en particular, se enamoran rápidamente de las excepciones y especialmente de emergencias como ésta.
Por muchos menos, desde Néstor Kirchner a su hermana hoy como gobernadora, se mantienen hace más de 30 años las “emergencias” y las “intervenciones” en Santa Cruz, porque la primera les da la potestad de alterar y saltear controles, trámites y autorizaciones y la segunda mantener el control de organismos como la Caja de Servicios Sociales, la Caja de Previsión Social entre otros lugares históricos a los cuales NK intervino en los ´90 para “regularizarlos” y los sucesivos gobierno K siguieron usando de caja hasta la fecha.

A nivel nacional claro está, no podía ser de otra manera.
El “enamoramiento” de los Fernández de la cuarentena, les ha permitido deslizar bajo las sábanas de este “pseudo proteccionismo estatal”, una cantidad de abusos inconstitucionales y también disimular el derrumbe económico, justificando el destino final del default.
El funcionamiento incansable de la máquina de hacer dinero, con la cual inyectan (como en las mejores épocas del gobierno de CFK) dinero al mercado que aumenta día a día la inflación, elevando solo al 50% el valor del dólar en los último días y también les permite:
Manejar discrecionalmente los fondos, hacer negocios partidarios y personales, favorecer a los amigos del poder, distribuir la pauta como se les ocurre y ejecutar cualquier tipo de acciones corruptas, para lo cual el krichnerismo/cristinismo, es un decano en “el arte” en la malversación de los recursos.

Pero además de las denuncias de corrupción por las compras sobrefacturadas, tanto del gobierno nacional, como el de la provincia de Buenos Aires y de CABA, donde Rodríguez Larreta no hace la diferencia en cantidad y calidad de hechos sospechados de irregularidades, más allá de ser otro abusivo del poder, quien pretendía multar y mandar a realizar servicios comunitarios a los abuelos de más de 70 años que vulneraran la cuarentena, las autoridades electas han potenciado, impulsado y accionado a favor de la libertad de presos y de hecho más de 2.500 delincuentes volvieron a sus casas gracias a los buenos oficios de Pietragalla, Mena y los gobiernos de Alberto y Axel, aunque públicamente lo nieguen desviando la responsabilidad hacia “la justicia”, aún cuando jueces como Violini, se haya declarado kirchneristas y alineado con La Cámpora, la facción política de Máximo que instruyó y puso en práctica el “Vatayón Militante” en la década robada, un burdo plan de liberación de chorros y asesinos, so pretexto de contribuir a la “sociabilización” de los condenados en cárceles argentinas.

En ese marco nos encontramos con el Viceministro de Justicia Juan Martín Menna el cual se sienta con un asesino serial para pactar un acuerdo de liberación de presos y Horacio Pietragalla, Secretario de DDHH de Alberto Fernández, quien genera cientos de hábeas corpus por día para liberar chorros y asesinos, a la vez que debemos escuchar al presidente decir con cara de “yo no fui”, que desde su gobierno no impulsan excarcelaciones y escuchar al gobernador Kicillof decir que “está en contra de la liberación de presos” mientras Claudia Cesaroni Directora General de Prevención del Delito y la Violencia de la Municipalidad de Quilmes cuya intendente es Mayra Mendoza una ultra K, a la par de cumplir funciones institucionales es la abogada que representa a los presos de Villa Devoto.

¡Genial!, muy del estilo cristinista:
Atender de los dos lados del mostrador.
Por un lado acompañando a los detenidos para que lograran su domiciliaria y por el otro simulando preocuparse por la seguridad de los quilmeños.

Fue tal el escándalo que Cesaroni debió renunciar a su cargo bajo el ala de Mendoza, aunque como a Vanoli la van a reponer en otro cargo, pero el daño al gobierno bonaerense de Kicillof o al de Alberto, por parte de Pietragalla y Mena, ya está hecho.
Mostraron ser parte de todo este proceso “sacapresos”, en línea con el pensamiento zafaroniano, del cual ahora parecen querer separarse, pero realmente, no lo pueden lograr porque se les fue de las mano y encontraron una resistencia popular inesperada.
El presidente ahora pone al Poder judicial “afuera” de sus decisiones, sosteniendo la división de poderes, pero hasta diciembre los jueces eran uno solo con el gobierno.
¿En tan poco tiempo el kirchnerismo logró acomodar la institución o será que está mintiendo?.
Los principales mandatarios del país : el presidente y el gobernador de la provincia de Buenos Aires tuvieron que dar marcha atrás y despegarse del proyecto que los tuvo como organizadores natos de este mecanismo brutal, antihumanitario e ilegal de poner a la sociedad en riesgo, socavando la seguridad y vulnerando el derecho de las víctimas y la ley que las protege.
Y la sociedad no se los perdonó.

Las cacerolas desde los balcones, los pocos medios críticos que puede manifestarse, algunos referentes de la oposición política lánguida que no han menguado y valientes como la Dra Silvina Martínez y algunos periodistas libres, han concientizado a una sociedad que reacciona a tiempo y amenaza con hacerles pagar en las urnas, tantos delitos cometidos desde el poder, aprovechándose (y esto es lo más grave) de la emergencia que nos distrae: el coronavirus.

Y aquí es donde los argentinos nos diferenciamos con otros países de la región.
Éste es un país el cual, a pesar de los malos gobiernos, la sociedad se guarda la carta de oro para hacer la jugada final y acomodar las cosas.
Y ésta no va a ser la excepción.
La “chavización” será abortada a tiempo, porque el argentino reacciona, aunque tardíamente a veces, pero bajo la convicción de no ceder sus derechos tan cándidamente como algunos aún creen poder hacerlo.
De hecho la Corte Suprema de la provincia de Buenos Aires, acaba de suspender las excarcelaciones masivas de Pietragalla y Menna.

Todo lo que pasa hoy fue dicho antes.
Todo lo que ocurrirá será dicho en este tiempo.
El tema fundamental es seccionar el populismo en dos y exponer a sus impulsores, demostrar sus intenciones, denunciar sus objetivos y hacerles cambiar el discurso.
Ésta última acción, es la que sepulta definitivamente el futuro político de sus cultores y reaviva en la sociedad la esperanza de que en nuestro país, nunca van a poder coronar un poder omnímodo en base a esta zona de confort que han encontrado en la pandemia y pretenden transformar en una herramienta de control social, para robarnos (además de los recursos y las libertades) la dignidad.
(Agencia OPI Santa Cruz)

No hay comentarios: