Ensayo de Kate Zernike /The New York Times
La economía anda a los tropiezos y sacudidas, las guerras avanzan con dificultas en Afganistán e Iraq, y los horrores de un nuevo ataque terrorista, cubren las noticias y llaman la atención de nuestra precaria alianzas en el mundo. La celebración de las Fiestas está muy moderada. Ciertamente, no hay nada que inspire mucho a la celebración.
Ser capaz de mantener la serenidad en plena tormenta, es cuestión de equilibrio para políticos como Barack Obama
Tal vez no sea casualidad, que para timonear la crisis, los estadounidenses hayan elegido a un hombre reconocido en repetidas ocasiones por su aplomo excepcional.
Más que nunca, los votantes, parecieron decir - entre otras cosas - que anhelan la estabilidad, una mano firme, y un rostro tranqilizador en la televisión.
A veces, ese equilibrio puede parecer sobre humano, pero no es atributo de unos pocos elegidos
Puede ser cultivado.
¿Cómo se logra, entonces, un temperamento sereno sin una dieta constante a base de beta bloqueantes y Xanax?
La calma, per se, no aparece en la taxonomía de los que estudian la personalidad y el temperamento.
Personas a las que coloquialmente podría describir como "serenas" se las califica en un nivel más bajo en la escala de neurosis - una escala de todo el mundo se mide en, en mayor o menor grado.
El nivel de neurosis de cada uno, está determinado en gran medida, por la genética. Pero también se halla bajo el control de cada persona.
Psiquiatras y psicólogos hablan de la regulación emocional - la capacidad de manejar la neurosis de tal manera que aun, las personas más nerviosas, pueden ir por la vida pareciendo y sintiendo que controlan más la situación, que quienes están genéticamente, predispuestas a la calma.
"Los estudios nos han demostrado que, más allá de que las personas estén genéticamente construídas de maneras que las hagan reaccionar, ansiosamente o no, existe una gran plasticidad", dijo James J. Gross, un profesor de psicología en la Universidad de Stanford y director de su laboratorio de psico-fisiología .
Es relativamente fácil decir sí un individuo es extrovertido o comunicativo. Los que estudian la personalidad advierten que es más facil saber cuán sereno "es" alguien, detrrás de la fachada... Se tomó nota de varias ocasiones en que el Presidente electo Barack Obama ha tenido problemas de insinuaciones por fumar.
Y pese a todos sus beneficios, la serenidad puede tener sus desventajas.
Según John D. Mayer, profesor de psicología en la Universidad de New Hampshire y uno de los primeros teóricos sobre el concepto de inteligencia emocional, "no hay dos personas en las cuales la serenidad funcione igual"
"La tranquilidad de un piloto de línea es realmente funcional y útil. La tranquilidad de un maestro podría ser mal interpretado como una falta de cuidado. Va a depender de cómo integrar el atributo de la personalidad que con sus metas, deseos, esperanzas y funcionamiento "
Para los onvestigadores, la mitad de las variaciones en las personalidades son el reflejo de la configuración genética, sobre la base de estudios que comparan, por ejemplo, a hermanos adoptados, mellizos o gemelos. El resto es definido por el medio ambiente, aunque resulta más difícil de conocer.
En el caso de Obama, su mujer ha dicho que Hawai es la clave para comprender su personalidad aparentemente relajada
Hoy en día, los estudios de personalidad que tienden a clasificar las personas en varias escalas, a menudo llamados los cinco grandes: la apertura, la conciencia, extroversión, neurosis y agresividad (algunos teóricos de identificar por términos diferentes, pero ofrecen la ventaja de un acrónimo, el Océano)
Estas son las características que la gente de todo el mundo han pedido a una y otra vez para evaluar ellos mismos ya los demás: hacer que tienden a estar interesadas en nuevas ideas o cerrado de mente?
¿Organizada o irresponsable? ¿Saliente o tímido? ¿Afectuoso o poco amable?
¿Fácilmente sacudió boyante o emocional en las mareas? ¿Y en qué combinaciones?
De estos, la consciencia a menudo es considerado el menos que depende de los genes, y la extroversión y la apertura de la mayoría.
Franklin D. Roosevelt, cuya tranquilidad se recuerda a menudo en el debate del señor Obama, puede haberla recibido de sus padres.
Según el relato de Jonathan Alter en "El momento definitorio", cuando la familia estaba a bordo del transatlántico Germania, al hundirse bajo una ola gigante, el padre de FDR observó fríamente, "Parecería que nos estamos hundiendo"
Su madre tomó su abrigo de piel y envolvió con él a Franklin de 3 años: "Sí tiene que hundirse, se hundirá abrigado"
Sin embargo, muchos investigadores sostienen que hay dos maneras de pensar acerca de tranquilidad: Una persona es serena o aprende a serlo...
Imaginemos a dos personas con niveles altos de neurosis, enfrentando al mismo jefe irascible elevado las medidas de neuroticismo se ocupan con el mismo jefe irascible. Uno recibe los gritos y abandona la oficina del jefe, perfectamente "compuesto". El otro recibe los gritos y se va corriendo al baño y comienza a golpear las paredes
La diferencia es que la primera persona ha aprendido a regular la neurosis.
La gente tiende a pensar que la confrontación produce la reacción, si usted está frente a una irracional Rant, ¿quién puede culpar por cayendo a pedazos?
Sin embargo, los investigadores en la regulación emocional, toman en consideración el factor entre: "cómo pensamos".
Esto puede resultarles más fácil a unos que a otros.
George Washington, conmemorado como un frío y austero líder, era muy temperamental, en su juventud, dice Dean Keith Simonton, un profesor de psicología en la Universidad de California en Davis, que ha estudiado los perfiles de la personalidad de los presidentes y dirigentes.
"Se cultivaba a través de pura voluntad".
"Se trata de capitalizar en su peor culpa por lo que se convierte en su mayor fortaleza", dijo el profesor Simonton.
Sin duda, que la tranquilidad geneera como premio "fuerza".
Considere la posibilidad de la compostura del piloto de Air Canada que trajo un vuelo desde Toronto a Londres el pasado mes de enero a un seguro aterrizaje de emergencia, después que su co-piloto comenzó a tener una crisis nerviosa. Según un informe sobre el incidente, el co-piloto se convirtió cada vez más desorientado y beligerante en algún lugar sobre el Atlántico y tuvo que ser sedado y desplazado por la fuerza de la cabina.
Pero si bien existe pruebas, que para las tareas complejas, conviene la serenidad, esto no significa que lo sea todo.
La gente quiere que los médicos sean serenos, pero también que manifiesten emoción y comprensión.
Cuando el Primer Ministro de la India, Manmohan Singh, finalmente apareció en la televisión antes de su agitado país 18 horas después de los atentados se inició en Bombay, la semana anterior, los indios lo criticaron por ser demasiado moderado, y no mostrar suficiente emoción.
Hay momentos en que queremos que nuestros dirigentes nos despierte de nuestra complacencia.
David Winter, psicólogo de la Universidad de Michigan que ha analizado el liderazgo de personalidades de los presidentes y otros dirigentes del mundo, dijo:
"No tengo pruebas contundentes de que grados más elevados de estabilidad emocional, desemboquen en liderazgo"
Winston Churchill, señaló, era muy temperamental. Calvin Coolidge fue tan sereno que resultaba flemático. Y F.D. Roosevelt, como el Sr Obama, podría ser tan sereno... al punto de parecer un control remoto.
Para los dirigentes, es un acto de equilibrio - comandar, pero también ser humanos.
"Si no hay una lágrima después que le informan que su abuela murió, si no hay un flash de ira contra los autores o la ansiedad que las personas se sienten como que pierden sus puestos de trabajo, no hay el sentido de conexión, que se trata de una persona real ", dijo el Profesor Gross
Lo que queremos de un líder con una mezcla paradójica:
Que sienta las mismas emociones que nosotros sentimos, pero que sea mejor que nosotros mismos"
La economía anda a los tropiezos y sacudidas, las guerras avanzan con dificultas en Afganistán e Iraq, y los horrores de un nuevo ataque terrorista, cubren las noticias y llaman la atención de nuestra precaria alianzas en el mundo. La celebración de las Fiestas está muy moderada. Ciertamente, no hay nada que inspire mucho a la celebración.
Ser capaz de mantener la serenidad en plena tormenta, es cuestión de equilibrio para políticos como Barack Obama
Tal vez no sea casualidad, que para timonear la crisis, los estadounidenses hayan elegido a un hombre reconocido en repetidas ocasiones por su aplomo excepcional.
Más que nunca, los votantes, parecieron decir - entre otras cosas - que anhelan la estabilidad, una mano firme, y un rostro tranqilizador en la televisión.
A veces, ese equilibrio puede parecer sobre humano, pero no es atributo de unos pocos elegidos
Puede ser cultivado.
¿Cómo se logra, entonces, un temperamento sereno sin una dieta constante a base de beta bloqueantes y Xanax?
La calma, per se, no aparece en la taxonomía de los que estudian la personalidad y el temperamento.
Personas a las que coloquialmente podría describir como "serenas" se las califica en un nivel más bajo en la escala de neurosis - una escala de todo el mundo se mide en, en mayor o menor grado.
El nivel de neurosis de cada uno, está determinado en gran medida, por la genética. Pero también se halla bajo el control de cada persona.
Psiquiatras y psicólogos hablan de la regulación emocional - la capacidad de manejar la neurosis de tal manera que aun, las personas más nerviosas, pueden ir por la vida pareciendo y sintiendo que controlan más la situación, que quienes están genéticamente, predispuestas a la calma.
"Los estudios nos han demostrado que, más allá de que las personas estén genéticamente construídas de maneras que las hagan reaccionar, ansiosamente o no, existe una gran plasticidad", dijo James J. Gross, un profesor de psicología en la Universidad de Stanford y director de su laboratorio de psico-fisiología .
Es relativamente fácil decir sí un individuo es extrovertido o comunicativo. Los que estudian la personalidad advierten que es más facil saber cuán sereno "es" alguien, detrrás de la fachada... Se tomó nota de varias ocasiones en que el Presidente electo Barack Obama ha tenido problemas de insinuaciones por fumar.
Y pese a todos sus beneficios, la serenidad puede tener sus desventajas.
Según John D. Mayer, profesor de psicología en la Universidad de New Hampshire y uno de los primeros teóricos sobre el concepto de inteligencia emocional, "no hay dos personas en las cuales la serenidad funcione igual"
"La tranquilidad de un piloto de línea es realmente funcional y útil. La tranquilidad de un maestro podría ser mal interpretado como una falta de cuidado. Va a depender de cómo integrar el atributo de la personalidad que con sus metas, deseos, esperanzas y funcionamiento "
Para los onvestigadores, la mitad de las variaciones en las personalidades son el reflejo de la configuración genética, sobre la base de estudios que comparan, por ejemplo, a hermanos adoptados, mellizos o gemelos. El resto es definido por el medio ambiente, aunque resulta más difícil de conocer.
En el caso de Obama, su mujer ha dicho que Hawai es la clave para comprender su personalidad aparentemente relajada
Hoy en día, los estudios de personalidad que tienden a clasificar las personas en varias escalas, a menudo llamados los cinco grandes: la apertura, la conciencia, extroversión, neurosis y agresividad (algunos teóricos de identificar por términos diferentes, pero ofrecen la ventaja de un acrónimo, el Océano)
Estas son las características que la gente de todo el mundo han pedido a una y otra vez para evaluar ellos mismos ya los demás: hacer que tienden a estar interesadas en nuevas ideas o cerrado de mente?
¿Organizada o irresponsable? ¿Saliente o tímido? ¿Afectuoso o poco amable?
¿Fácilmente sacudió boyante o emocional en las mareas? ¿Y en qué combinaciones?
De estos, la consciencia a menudo es considerado el menos que depende de los genes, y la extroversión y la apertura de la mayoría.
Franklin D. Roosevelt, cuya tranquilidad se recuerda a menudo en el debate del señor Obama, puede haberla recibido de sus padres.
Según el relato de Jonathan Alter en "El momento definitorio", cuando la familia estaba a bordo del transatlántico Germania, al hundirse bajo una ola gigante, el padre de FDR observó fríamente, "Parecería que nos estamos hundiendo"
Su madre tomó su abrigo de piel y envolvió con él a Franklin de 3 años: "Sí tiene que hundirse, se hundirá abrigado"
Sin embargo, muchos investigadores sostienen que hay dos maneras de pensar acerca de tranquilidad: Una persona es serena o aprende a serlo...
Imaginemos a dos personas con niveles altos de neurosis, enfrentando al mismo jefe irascible elevado las medidas de neuroticismo se ocupan con el mismo jefe irascible. Uno recibe los gritos y abandona la oficina del jefe, perfectamente "compuesto". El otro recibe los gritos y se va corriendo al baño y comienza a golpear las paredes
La diferencia es que la primera persona ha aprendido a regular la neurosis.
La gente tiende a pensar que la confrontación produce la reacción, si usted está frente a una irracional Rant, ¿quién puede culpar por cayendo a pedazos?
Sin embargo, los investigadores en la regulación emocional, toman en consideración el factor entre: "cómo pensamos".
Esto puede resultarles más fácil a unos que a otros.
George Washington, conmemorado como un frío y austero líder, era muy temperamental, en su juventud, dice Dean Keith Simonton, un profesor de psicología en la Universidad de California en Davis, que ha estudiado los perfiles de la personalidad de los presidentes y dirigentes.
"Se cultivaba a través de pura voluntad".
"Se trata de capitalizar en su peor culpa por lo que se convierte en su mayor fortaleza", dijo el profesor Simonton.
Sin duda, que la tranquilidad geneera como premio "fuerza".
Considere la posibilidad de la compostura del piloto de Air Canada que trajo un vuelo desde Toronto a Londres el pasado mes de enero a un seguro aterrizaje de emergencia, después que su co-piloto comenzó a tener una crisis nerviosa. Según un informe sobre el incidente, el co-piloto se convirtió cada vez más desorientado y beligerante en algún lugar sobre el Atlántico y tuvo que ser sedado y desplazado por la fuerza de la cabina.
Pero si bien existe pruebas, que para las tareas complejas, conviene la serenidad, esto no significa que lo sea todo.
La gente quiere que los médicos sean serenos, pero también que manifiesten emoción y comprensión.
Cuando el Primer Ministro de la India, Manmohan Singh, finalmente apareció en la televisión antes de su agitado país 18 horas después de los atentados se inició en Bombay, la semana anterior, los indios lo criticaron por ser demasiado moderado, y no mostrar suficiente emoción.
Hay momentos en que queremos que nuestros dirigentes nos despierte de nuestra complacencia.
David Winter, psicólogo de la Universidad de Michigan que ha analizado el liderazgo de personalidades de los presidentes y otros dirigentes del mundo, dijo:
"No tengo pruebas contundentes de que grados más elevados de estabilidad emocional, desemboquen en liderazgo"
Winston Churchill, señaló, era muy temperamental. Calvin Coolidge fue tan sereno que resultaba flemático. Y F.D. Roosevelt, como el Sr Obama, podría ser tan sereno... al punto de parecer un control remoto.
Para los dirigentes, es un acto de equilibrio - comandar, pero también ser humanos.
"Si no hay una lágrima después que le informan que su abuela murió, si no hay un flash de ira contra los autores o la ansiedad que las personas se sienten como que pierden sus puestos de trabajo, no hay el sentido de conexión, que se trata de una persona real ", dijo el Profesor Gross
Lo que queremos de un líder con una mezcla paradójica:
Que sienta las mismas emociones que nosotros sentimos, pero que sea mejor que nosotros mismos"
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