Publicado el 6 de December, 2008 en Editorial, Susana Sechi
Ante un numeroso auditorio, la Presidente mantuvo otra de sus charlas de quincho, esta vez para anunciar otro paquete de medidas denominado “plan de contingencia”. La Señora capaz de explicar hasta lo que no entiende, brindó una acabada traducción de los motivos que han entorpecido el fabuloso plan incorporado desde el histórico 25 de mayo del 2003, en que su esposo el primer Néstor, creyéndose estadista cambió las bases de la economía, el modo de vida de los argentinos y hasta la identidad del país.
La robusta economía Argentina que según Cristina Kirchner ha sido atacada por la foránea crisis internacional, debe ser corregida con esa suerte de paquetes que se vienen desenvolviendo cada 15 días pero que todavía no se han concretado. Por supuesto los Kirchner nada tienen que ver con la tormenta, aun cuando venían ocultando los vientos por medio de los fraguados porcentuales del Indec, que no sólo taparon la inflación, sino que engordaron el crecimiento por medio de los ficticios números.
Sin embargo la inocencia de la pareja fue totalmente definida en el discurso de la Primer Mandataria. El remesón ha venido de afuera, con claridad la Señora evadió responsabilidades y acusó a la crisis financiera internacional de todos los males que nos aquejan, aun de los que se han venido arrastrando antes de que esta hiciera eclosión en la Argentina.
Tan hipócrita mensaje aplaudido por la concurrencia, colmó la paciencia de un sometido cuerpo social al que día a día se lo está despojando de todo, mientras la cara visible del poder ofrece préstamos personales de 5 mil pesos para la compra de electrodomésticos a un interés del 11%, futuros planes para la compra de autos o Km y bajas irrisorias de un 5% para las retenciones en las exportaciones de trigo y maíz, ahora que todo está perdido.
Estos insultos a las capacidades intelectuales de los ciudadanos no se pueden caratular como novedoso plan B dado que durante estos interminables 5 años y medio han sido parte de los argumentos del régimen tiránico.
Todavía no cuentan en sus arcas con los dineros saqueados a las AFJP y ya se manejan con el olor del mal habido botín, que le ha costado sangre, sudor y lágrimas a los hoy arrebatados dueños de los fondos privados. Pero el matrimonio desvergonzado no tiene reparos en digitar un plan echando mano a esos depósitos, para vender ilusiones como aquellos créditos de la casa propia que nunca nadie pudo alcanzar.
En tanto la Señora se regodeaba con su pobre interpretación, tratando de mostrar lo que natura no da, mientras los ánimos de los argentinos ante tanta bajeza se están volviendo irascibles, sobretodo después de escuchar a los gurús que son parte de la farsa gubernamental, paseándose por los canales de.TV amigos, ensalzar, los alcances de la parodia oficial.
La perlita del encuentro proporcionada por la egocéntrica emulo del apuntador que reside en el Club Social de Olivos, no sin antes de ostentar su título de abogada de palabra, se explayó nuevamente con los conocimientos adquiridos, está vez, no fue el juyito, sino la materia apuntó a la ganadería, incursionando también en la producción láctea, trajo una mágica solución a los tamberos, por medio de un negocio redondo que aumentaría sus reducidos ingresos, ‘vender los overos, estos aproximadamente 600 mil animales paridos por las vacas lecheras representarían para la actividad un modelo de acumulación de capitales.
Al parecer nadie ha quedado exento de lista de oportunidades para alentar el consumo, el Estado benefactor piensa en todos, poco a poco se está produciendo la devaluación pedida por los empresarios, los jubilados podrán acceder a un nuevo lavarropas, heladera o porqué no un televisor de LCD para alegrarse con las noticias provistas por el gobierno, y escuchar a la Señora cuando remarca los 690 pesos que tan generosamente les han sido otorgados para no tener privaciones a ninguno de los lujos de la buena vida que se merecen. Después de todo la ANSeS trabaja incansablemente en cuidar sus aportes, sino, que más que recordar que en maravillosa gestión de Sergio Massa se cambiaron los inservibles y feos pesos depositados, por hermosos papelitos de colores.
Quizás los argentinos no lleguen ha comprender las bases de este progresismo enquistado en latino América, tan protector de sus gobernados al punto de decidir por ellos.. ¿para qué se tendrían que preocuparse los ciudadanos? si los pequeños tiranos velan por ellos y así los Chávez, los Morales y los Kirchner manejan los dineros públicos con absoluta eficacia y también han logrado que el gasto público aumente desproporcionadamente con el correr de los días, pero la sociedad no parece estar conforme. ¿Será porqué las obras de infraestructura nunca se realizaron, porqué la inseguridad es el flagelo de los ciudadanos decentes? ¿Porqué el estado de derecho se ha desterrado, porqué la división de poderes está en desuso o porqué la Constitución Nacional es un recuerdo del pasado?
Y aquí nos encontramos, esperando la carroza, mientras los victimarios se burlan de todos nosotros y la prima donna diariamente pone en escena una nueva opera, y no precisamente bien interpretada. Un juego del ridículo, de inoperancia y de perversidad, apaciguado con las mieles de un decreto que apela a la inconsciencia de no trabajar, en un país estancado.
La carroza que esperamos no pasará… y si queremos alcanzarla deberemos salir a buscarla cuanto antes, de no ser así en un abrir y cerrar de ojos nos quedaremos en harapos, de a pie… contemplando a la restaurada señora que ríe…
Autor: Susana Sech
Ante un numeroso auditorio, la Presidente mantuvo otra de sus charlas de quincho, esta vez para anunciar otro paquete de medidas denominado “plan de contingencia”. La Señora capaz de explicar hasta lo que no entiende, brindó una acabada traducción de los motivos que han entorpecido el fabuloso plan incorporado desde el histórico 25 de mayo del 2003, en que su esposo el primer Néstor, creyéndose estadista cambió las bases de la economía, el modo de vida de los argentinos y hasta la identidad del país.
La robusta economía Argentina que según Cristina Kirchner ha sido atacada por la foránea crisis internacional, debe ser corregida con esa suerte de paquetes que se vienen desenvolviendo cada 15 días pero que todavía no se han concretado. Por supuesto los Kirchner nada tienen que ver con la tormenta, aun cuando venían ocultando los vientos por medio de los fraguados porcentuales del Indec, que no sólo taparon la inflación, sino que engordaron el crecimiento por medio de los ficticios números.
Sin embargo la inocencia de la pareja fue totalmente definida en el discurso de la Primer Mandataria. El remesón ha venido de afuera, con claridad la Señora evadió responsabilidades y acusó a la crisis financiera internacional de todos los males que nos aquejan, aun de los que se han venido arrastrando antes de que esta hiciera eclosión en la Argentina.
Tan hipócrita mensaje aplaudido por la concurrencia, colmó la paciencia de un sometido cuerpo social al que día a día se lo está despojando de todo, mientras la cara visible del poder ofrece préstamos personales de 5 mil pesos para la compra de electrodomésticos a un interés del 11%, futuros planes para la compra de autos o Km y bajas irrisorias de un 5% para las retenciones en las exportaciones de trigo y maíz, ahora que todo está perdido.
Estos insultos a las capacidades intelectuales de los ciudadanos no se pueden caratular como novedoso plan B dado que durante estos interminables 5 años y medio han sido parte de los argumentos del régimen tiránico.
Todavía no cuentan en sus arcas con los dineros saqueados a las AFJP y ya se manejan con el olor del mal habido botín, que le ha costado sangre, sudor y lágrimas a los hoy arrebatados dueños de los fondos privados. Pero el matrimonio desvergonzado no tiene reparos en digitar un plan echando mano a esos depósitos, para vender ilusiones como aquellos créditos de la casa propia que nunca nadie pudo alcanzar.
En tanto la Señora se regodeaba con su pobre interpretación, tratando de mostrar lo que natura no da, mientras los ánimos de los argentinos ante tanta bajeza se están volviendo irascibles, sobretodo después de escuchar a los gurús que son parte de la farsa gubernamental, paseándose por los canales de.TV amigos, ensalzar, los alcances de la parodia oficial.
La perlita del encuentro proporcionada por la egocéntrica emulo del apuntador que reside en el Club Social de Olivos, no sin antes de ostentar su título de abogada de palabra, se explayó nuevamente con los conocimientos adquiridos, está vez, no fue el juyito, sino la materia apuntó a la ganadería, incursionando también en la producción láctea, trajo una mágica solución a los tamberos, por medio de un negocio redondo que aumentaría sus reducidos ingresos, ‘vender los overos, estos aproximadamente 600 mil animales paridos por las vacas lecheras representarían para la actividad un modelo de acumulación de capitales.
Al parecer nadie ha quedado exento de lista de oportunidades para alentar el consumo, el Estado benefactor piensa en todos, poco a poco se está produciendo la devaluación pedida por los empresarios, los jubilados podrán acceder a un nuevo lavarropas, heladera o porqué no un televisor de LCD para alegrarse con las noticias provistas por el gobierno, y escuchar a la Señora cuando remarca los 690 pesos que tan generosamente les han sido otorgados para no tener privaciones a ninguno de los lujos de la buena vida que se merecen. Después de todo la ANSeS trabaja incansablemente en cuidar sus aportes, sino, que más que recordar que en maravillosa gestión de Sergio Massa se cambiaron los inservibles y feos pesos depositados, por hermosos papelitos de colores.
Quizás los argentinos no lleguen ha comprender las bases de este progresismo enquistado en latino América, tan protector de sus gobernados al punto de decidir por ellos.. ¿para qué se tendrían que preocuparse los ciudadanos? si los pequeños tiranos velan por ellos y así los Chávez, los Morales y los Kirchner manejan los dineros públicos con absoluta eficacia y también han logrado que el gasto público aumente desproporcionadamente con el correr de los días, pero la sociedad no parece estar conforme. ¿Será porqué las obras de infraestructura nunca se realizaron, porqué la inseguridad es el flagelo de los ciudadanos decentes? ¿Porqué el estado de derecho se ha desterrado, porqué la división de poderes está en desuso o porqué la Constitución Nacional es un recuerdo del pasado?
Y aquí nos encontramos, esperando la carroza, mientras los victimarios se burlan de todos nosotros y la prima donna diariamente pone en escena una nueva opera, y no precisamente bien interpretada. Un juego del ridículo, de inoperancia y de perversidad, apaciguado con las mieles de un decreto que apela a la inconsciencia de no trabajar, en un país estancado.
La carroza que esperamos no pasará… y si queremos alcanzarla deberemos salir a buscarla cuanto antes, de no ser así en un abrir y cerrar de ojos nos quedaremos en harapos, de a pie… contemplando a la restaurada señora que ríe…
Autor: Susana Sech
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