Periodismo y oposición flojos

No se juegan por la verdad, y contra ella también atenta la actitud “Políticamente correcta”
Así el país no saldrá adelante …

El Gobierno hábilmente ha instalado la idea de que denunciar sus incorrecciones es intentar desestabilizar o quejarse injustificadamente

Muchos se preguntan si después del 23 de Octubre la Presidente continuará con su luto y llantos en público...

Aún el periodismo que dice ser independiente, se ha debilitado en sus reclamos de decencia e idoneidad hacia el Gobierno.
Y éste, aplicando una acción psicológica bien estudiada por sus asesores en esa materia, ha instalado la idea en la comunidad, de que quienes se quejan en realidad están incursos en algún tipo de operación ilegal que atenta contra la democracia, y sólo apunta a desestabilizar o atentar contra un Gobierno que cada día hace mejor las cosas.
Sin embargo, podría trazarse un listado interminable de críticas al kirchnerismo, las que van desde el recordatorio de los graves hechos de corrupción sucedidos durante sus dos Gobiernos, o acerca de las innumerables promesas incumplidas u otro tipo de mentiras que son conocidas, en realidad por la mayoría de los ciudadanos, por más disfrazadas que las mismas se encuentren.

La idea que se ha instalado es que ser opositor es no reconocer los enormes logros del Gobierno, a todo nivel.
Y es entonces que comienzan desde el mismo a presentar un listado de hechos que, si quien lo escucha vive en Alaska o en Singapur, tal vez termine admitiendo la grandeza del kirchnerismo.

Lo más triste, tal vez, es que aún entre quienes viven en la Argentina y han atravesado los dos períodos de ese signo en el Gobierno, haya olvidadizos o que no reconozcan lo que tanto NÉSTOR KIRCHNER como su Esposa, representan, en cuanto a una ideología, o una aspiración de gobernar, que tuvo su inicio en los años setenta, a través de la imposición de la violencia y el terrorismo por las armas, y los explosivos, lo que tantas muertes y daños causó, algo que se niega sistemáticamente desde el Gobierno y sobre lo cual, también sistemáticamente, se miente o tergiversa.

Podrían decir, los ingenuos o los indebidamente informados, que eso es historia del pasado.
Sí, efectivamente sucedió en el pasado, pero eso no le resta gravedad, y lo peor es que los representantes de ese período de la historia de la Argentina, hoy están gobernando el país.

Mucho no han de haber cambiado, en su concepción de conducción de una Nación.
Tal vez hoy no tengan como ideal al castrismo que es lo que los formó y alentó por aquel entonces, sino a otros símbolos más actuales, pero no diferentes en los valores de fondo, ni tampoco en los fines que los alimentan.
Especialmente, los ideólogos que sostienen a la Presidente, son quienes actuaron con las armas en aquella dolorosa década.
Son algo mayores ya, es cierto, pero mantienen su odio intacto, a juzgar por las directivas que continúan dando, sobretodo en cuanto al tratamiento que deben recibir quienes en su momento los combatieron, en defensa de la Patria.
Y si hay jóvenes entre los ideólogos del actual Gobierno, serán aquellos que ya tienen su cabeza lo suficientemente lavada como para pensar como sus antecesores.

Circula por estos días en Internet, especialmente a partir del doloroso accidente ocurrido en las cercanías de la Estación Flores del Ferrocarril Sarmiento, un listado de promesas incumplidas que el Gobierno de NÉSTOR KIRCHNER, y el actual de su Esposa, han manifestado.
En este caso, dando preferencia a las cuestiones del transporte.
Se trata de un trabajo bastante minucioso, que refleja la enorme cantidad de mentiras que se han emitido, en particular durante las campañas proselitistas, lo que ha llevado a muchos ciudadanos a que, confiando en esos dichos, terminaron por votar al candidato oficialista.

El listado es tan extenso que ocuparía páginas de la presente nota, con el riesgo de aburrir al lector.

Como la memoria de los argentinos es bastante lábil, según queda demostrado en cada elección de gobernantes, es que no hay tantos reclamos, ni forma de efectuarlos, pues el mismo Gobierno se ha encargado hoy de debilitar las instituciones para poder gobernar del modo más cómodo posible, sin ningún tipo de interferencias legales.

La cuestión es que, desde la oposición, hay una gran debilidad que le permite al kirchnerismo seguir actuando arbitraria y discrecionalmente, lo que convierte esa conducta en una actitud perversa:
El Gobierno transgrede las leyes y entre esos ataques a la misma, se procura debilitar, cuando no anular definitivamente, los controles constitucionales previstos por los sabios que en su momento los estudiaron para una adecuada aplicación y salvaguarda de las instituciones.

Si a todo este panorama se suma la laxitud con que cierto sector de la Prensa, actúa en respuesta, termina de configurarse un panorama preocupante, para el futuro, porque hasta los más jóvenes se van formando en ese sistema al que adoptan como normal.
Ellos también, pese a la natural y propia rebeldía de la juventud, se convierten en “Políticamente correctos”, por más que haya excepciones valiosas que merezcan ser destacadas.

El asalto a la Argentina por un grupo de ilegales aunque con los arreglos necesarios como para no parecerlo, es algo sobre lo que la sana población debería reflexionar, y obrar en consecuencia, rescatando, para ello, todas las facultades que las sabias leyes crearon al efecto.

No son pocas ni tan débiles esas armas, sólo hace falta la decisión de darles uso…


Fuente: Enfoques Positivos