Ricardo
Roa
A veinte meses
de la muerte de Nisman, la investigación de si fue suicidio o asesinato no
avanza.
A
veinte meses de su denuncia contra Cristina, la investigación sigue bloqueada.
Demasiado
grave y demasiado desprolijo todo:
Por qué una
causa no avanza y por qué otra causa ni siquiera ha sido iniciada.
Lo
que se tiene es:
No se sabe cómo
murió y no hace falta saber sobre lo que el fiscal denunció.
Lo
que se tiene es también que donde aparece la facción kirchnerista de Justicia
Legítima ya se sabe que no pasa nada.
Dos
veces y en el orden exacto en que debían pronunciarse, el juez Rafecas y los
camaristas Ballestero y Freiler dijeron
no a investigar a Cristina por encubrir a los presuntos autores de la masacre
en la AMIA.
También
cerraron la puerta a que la AMIA se convirtiera en parte querellante.
Un
recorrido al carbónico:
Rafecas
desestima la denuncia sin leerla, el fiscal Pollicita apela, los dos camaristas
ratifican al juez, el fiscal Moldes apela ante Casación y el fiscal De Luca rechaza.
La
secuencia puede tomar otro rumbo esta vez.
Ballestero
es el mismo que fue juez preferido del menemismo y después juez preferido de
Scioli, que pensaba llevarlo a la Corte.
Por orden de
Cristina, Scioli le pidió que votara para desplazar a Bonadio de la causa
Hotesur.
Freiler
también participó en esa maniobra contra el juez que molestaba y molesta a
Cristina.
Es el mismo
Freiler que como fiscal había sobreseído por lavado a la lavadora viuda del
jefe narco Escobar Gaviria.
Y
que durante la era K se enriqueció como el uranio:
Compró
una mansión de dos plantas frente a la quinta de Olivos.
“No
me acuerdo cuánto pagué”, dijo.
Un
fiscal le encontró además un departamento en Pinamar, 20 caballos y dos
Mercedes Benz.
Y
lo acusó de enriquecimiento ilícito.
Pero
el juez Martínez de Giorgi lo absolvió.
Los Kirchner
montaron una Justicia en la que la verdad importa poco.
También
votó contra Bonadio Ana María Figueroa, presidente de la Sala 1 de Casación en
que caerá la denuncia de Nisman.
Es
la jueza preferida de Zannini.
Radio
pasillo Comodoro Py dice que Figueroa tiene planes para neutralizar a los
camaristas subrogantes Hornos y Borinsky que la tienen 2-1 y que están
dispuestos a cambiar la historia.
Uno
es dilatar el proceso para aprovechar que el mandato de ambos vence a fin de
año.
Otro,
que sean recusados.
Un hijo
funcionario de la propia Figueroa ya husmea archivos para encontrar datos sobre
los dos.
Pero
falta un detalle:
Que
ahora se acepte a la DAIA como querellante y la denuncia de Nisman sea
reflotada.
Entonces
la protección a Cristina empezará a hacer agua...
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