Horacio
Ricardo Palma
Julio...donde
vos estás, estuve de visita mil veces.
Vas a ver
que lo que tus jefes llamaban Hospital, es una mierda que no tiene ni gasas.
Que lo que
tus jefes aseguraban servía hasta para enfermos cardíacos crónicos, no sirve ni
para una descompostura de estómago.
A veces no
hay agua...
A veces no
hay luz…
O enchufas
un horno en el toma incorrecto, y los días sin luz, se harán semanas.
Desde las
ventanas vas a ver rejas, algo de pasto..,
Y más rejas.
Y al fondo,
en el ala correcta vas a ver barrios humildes a los que ustedes les arruinaron
la vida.
Vas a ver
que la mitad de los días no vas a tener agua caliente…
Pero no importa, según tus jefes de antaño, los
viejos que estaban allí por haber combatido al terrorismo, no se merecían agua
caliente…
Ni siquiera
cagar escondidos.
Mientas vos
estas sentado en el inodoro, alguien se asomará por la ventana de la puerta
solo para ver cagar al otrora todopoderoso señor.
Y te va a
caer la ficha, siempre cae, si valió la pena haberse cagado en tantos…
Sos un tipo
inteligente Julio, se nota, por eso estoy seguro que esta noche te pasarán
horas con insomnio, maldiciendo haberte encogido de hombros por tantos y
tantos.
Sabé que
allí donde dormirás en las próximas noches, han dormido viejos muy dignos.
Que no se
ampararon en fueros, que no contrataron a un abogado por millones, que
aguantaron estoicos ser atendidos en un lugar inmundo.
Cuando
quieras hablar por teléfono, tus familiares te reconocerán, si funciona el teléfono claro, por esa
inigualable voz que avisa que la llamada proviene de un Establecimiento
Penitenciario que, curiosamente…le falta todo, todo, todo…
Lo que
funcionarios y políticos como vos y tus jefes se robaron durante una década.
Las vueltas
de la vida Julio...
Suerte... y
que tengas muchas visitas siempre.
Porque la soledad,
amiga de los malos tiempos, angustia y enferma los huesos…
No hay comentarios:
Publicar un comentario