Chávez, a grito de guerra...

DELGADA LINEA ROJA
Por: Gustavo Sierra

Sólo un militar que jamás haya hecho la guerra puede darse el lujo de llamar a las armas a su pueblo con la ligereza con que lo hizo el comandante Hugo Chávez.

La guerra es sólo muerte y destrucción.
Nada se puede construir desde ese estado de violencia extrema.

Los estadistas extraordinarios de la Historia lo sabían y por eso recurrían a la guerra sólo cuando no tenían ningún otro camino por recorrer.
Los obtusos, en cambio, se lanzan al campo de batalla con liviandad y sin importarles las terribles consecuencias que eso traerá para sus pueblos.

Chávez no solo llamó en forma ligera a los jóvenes venezolanos a prepararse para una inminente confrontación con Colombia sino que con la misma actitud, unos días más tarde, dijo que sólo había pedido que se alistaran para la defensa.

¿Quién va a atacar a Venezuela?

Esto no quiere decir que Chávez no tenga razón en pensar que las bases que Colombia cedió a Estados Unidos no puedan ser utilizadas para defender algún interés de ese país en la región. Para eso es que van a ir acumulando C-17, Orions, Awads y otros aviones de vigilancia.
Se trata de "bases expedicionarias" con las que Washington puede vigilar una zona geográfica asegurándose el abastecimiento de sus naves.
Pero el real motivo por el que Chávez lanzó este grito bélico pareciera, mas bien, "es" su creciente deterioro interno.

< Hay racionamiento de agua y electricidad.
< Cada barrio de Caracas se queda sin agua al menos dos días por semana. Y algunas escuelas y hospitales afectados suspenden sus actividades en esos días.

Oficialmente, se contabilizaron 117 apagones importantes en los últimos seis meses.
Todo eso le está haciendo perder popularidad al carismático presidente.

Una encuesta de la prestigiosa empresa Datanálisis indica que
< el 66% de los venezolanos está "totalmente insatisfecho" con la gestión chavista para resolver la crisis energética
< el 87% dice que el gobierno no hace nada ante la creciente inseguridad
< y el 70% critica abiertamente la falta de políticas para crear empleo.

Y, lo que es más importante, el 80% de los venezolanos rechaza la posibilidad de cualquier conflicto bélico con Colombia.