Quién inventa la realidad de una Argentina inédita

Por: Marcelo A. Moreno

El presidente del partido gobernante muestra inclinaciones filosóficas.

En la semana, en un discurso de inusual agresividad -incluso para él-, acusó a este diario de inventar la realidad.
Lo hizo a su manera: "No hay nada de verdad con lo que tenga que ver con la Argentina que salga de ese monopolio"

Clarín, como es fácil de comprobar, no es un monopolio, ya que tiene una sobrada y fuerte competencia -con lo cual no es Clarín el que falta a la verdad- y refleja en sus páginas lo que sucede día a día en la Argentina, por lo cual es seguido por millones de lectores.

Lo cierto es que, como el resto del periodismo independiente y no adscripto al dispendioso favor gubernamental, se encuentra ante un verdadero desafío profesional, pues debe dar cuenta, a diario, de una Argentina inédita.
Y si la única verdad es la realidad, se puede convenir en que esa realidad -envejecidos, después de más de seis años de gestión, los argumentos sobre la "herencia recibida"- es una creación -¿una invención?- del kirchnerismo.

Kirchner puntualizó:
- "El gran diario argentino procuró mostrar las largas colas que hacía el pueblo argentino para anotarse para percibir las asignaciones. Quiso demostrar una supuesta ineficiencia del Estado"

La verdad es que Clarín mostró el triste asombro de una realidad nunca vista antes en la Argentina: "La de las interminables colas de indigentes y pobres" para anotarse en el subsidio por hijo.
Todo, después de años y años de una gestión que proclama con bombos y platillos estar redistribuyendo la riqueza.

También Clarín y el resto de los medios independientes dieron cuenta, hace unos días, de una batalla patéticamente inaugural en la historia argentina:
< La de veteranos de la guerra de Malvinas contra ex conscriptos citados para esa contienda y que pretenden que se los reconozca como ex combatientes.
En síntesis: "Un choque por subsidios"

Porque esa es otra realidad hasta ahora desconocida que el periodismo independiente refleja: hoy las pugnas no son, como en otras épocas, por el trabajo -su calidad o cantidad- sino, sobre todo, por la caridad estatal.

Las diarias manifestaciones que embarullan día a día hasta el paroxismo el centro porteño y de otras ciudades reclaman eso y sólo eso: ASsistencia social.

El periodismo independiente, además, exhibe la nueva posición del país en el mundo.

Un ejemplo de estos días: el presidente de nuestro socio Brasil, sin dar explicación alguna a la Argentina, recibió con manifiesta amistad al de Irán, nación que mantiene una gravísima controversia diplomática con la nuestra, ya que se niega a que la Justicia argentina interrogue a varios de sus funcionarios sobre los que pesan fuertes sospechas de haber estado involucrados en el atentado a la AMIA, el más pavoroso que sufrimos en la historia.
Este destrato también resulta inédito.

Y el periodismo independiente, con patética recurrencia, debe consignar la violencia casi indiscriminada que produce la inseguridad, instalada como un castigo social por la inoperancia de los gobernantes.

De la catarata de crímenes, uno, de hace unos días, refleja un horror flamante: el caso de la madre acusada de matar a su hijo de 12 años a puñaladas en la estación de Flores porque "mendigaba poco".
La mujer, de 38 años, es adicta al paco y la encontraron en una sala de primeros auxilios de Moreno, internada por una intoxicación.

Es difícil estimar el grado de espanto que agobian estas pocas líneas.
Lo que sí constituye un fenómeno antes desconocido, es la aterradora epidemia de paco que devasta en especial a los sectores más vulnerables de la sociedad argentina, sin que nadie esboze ni un principio de solución.

Si no existiera la prensa independiente estas novedosas laceraciones no se conocerían y los Kirchner vivirían en su realidad idílica.
Pero todavía a los medios no los diseña el INDEC, aunque ganas no faltan: jamás en la historia de la democracia argentina el periodismo independiente estuvo tan amenazado desde el corazón del poder como en estos tan tristes días.

Zenón de Elea fue un filósofo presocrático que floreció -como adjetivan los antiguos libros- en el siglo V antes de nuestra era e ideó una serie de paradojas que desafiaban con genio la realidad.

Una de ellas postulaba la imposibilidad de probar que una flecha sea lanzada, con lo cual desmentía la existencia del movimiento.

Pero "la fecha que nunca parte" fue una engañosa afrenta a la verdad:

< La verdad es que la flecha está en el aire...

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El Papa hizo un fuerte llamado a enfrentar la pobreza y la corrupción

Con esta frase, el Papa volvió a mencionar dos temas, la pobreza y la corrupción, que provocaron más de una polémica entre el Gobierno argentino, el Episcopado local y en el que alguna vez también quedó involucrado el propio Vaticano.

En diálogo con este diario, altos funcionarios kirchneristas buscaron despegar el comentario de Benedicto XVI a la realidad argentina.

< "Fue un llamamiento en general" [1], como se suelen hacer.
El Papa no se mete con temas de política interior, no desciende a estos niveles", evaluó uno de ellos.
< "Nosotros sabemos que hay pobreza, vemos las villas...
< Pero no creemos que este mensaje fuera dirigido a nosotros", se sumó el otro.

[1]En el país de los ciegos, don Kirchner y su mujer son el Kingdom...

Para esos altos funcionarios kirchneristas,¿cuál habrá sido la "generalidad", cuando sólo estaban Michelle Bachelet y nuestra presidentA?

Bien podríamos cambiarles la calificación: de kirchneristas a "Zenones de Argentina"

Corina Ríos