"De Argentina para el mundo..."



Caricatura de Alfredo Sabat

sábado, 24 de marzo de 2012

"6791 ed ozram ed 42..." (24 de Marzo1976)


(1)
Doy inicio formal a mi Espacio Sabatino correspondiente al 24 de marzo de 2012.
El mismo está dedicado y pensado para TODOS y CADA UNO de ustedes, mis apreciados amigos de Facebook.
Y comienza con mi editorial, que se titula: “6791 ed ozram ed 42”.
Quédense tranquilos: Ustedes no están leyendo cualquier cosa.
No están más que percibiendo algo que escribí AL REVÉS, referente a la impostura que nos hacen soportar hoy: El recuerdo parcial, recortado, mendaz y encubridor del 24 de marzo de 1976.
Y así como el régimen –e, implícita o explícitamente, su presunta “oposición”- se arrogan el “derecho” a dar vuelta las cosas, yo he decidido hacer lo mismo.
Podría haberle puesto a mi editorial “Germinal 4”, utilizando el calendario revolucionario francés.
O bien "11 de marzo", reactivando el calendario juliano, lo que haría coincidirlo con la fecha del calendario gregoriano en que el dentista Cámpora se convirtió en presidente de una República a la que contribuiría a descalabrar en cuarenta y nueve días de desgobierno.
El pronunciamiento militar del 24 de marzo de 1976 NO puede analizarse si no se tienen en cuenta dos factores:
I°) Externo: Un mundo sumido en la Guerra Fría, donde la URSS, a través de su satélite Cuba, organizó la Conferencia Tricontinental en 1966 y la OLAS (Organización Latinoamericana de Solidaridad) en 1967, con el objeto de llevar la guerra revolucionaria subversiva a tres continentes: Asia, África y América “Latina”, con vistas a lograr, mediante el empleo del terrorismo urbano y rural, la caída de esos gobiernos para implantar tiranías colectivistas totalitarias socialistas de partido único subordinadas al régimen soviético, lo que podríamos denominar como la “Doctrina Brezhnev-Gromyko”. Brezhnev, a principios de la década de 1970, llegó a decir que “allí donde vaya la Argentina irá la URSS”.
La Conferencia Tricontinental reunió a las principales organizaciones subversivas y terroristas que ensangrentaron tanto a la Argentina como al resto de “América Latina”. Algunos de sus agentes más conocidos fueron Salvador Allende Gossens y el “Che” Guevara Lynch.
Con un contexto internacional muy favorable, con los Estados Unidos en retirada de Vietnam, con la URSS con superioridad en cabezas nucleares y con un convencimiento de que el bloque comunista podría ser el ganador de la Guerra Fría, la agresión subversiva en nuestro país no trepidó en asesinar hombres y mujeres de toda condición social. Se infiltraban en cualquier sitio o actividad para lograr sus propósitos. Podían ser “soldados conscriptos”, “maestros de escuela”, “sacerdotes”, “empleados públicos”, etcétera. Sus casas –los “aguantaderos” en los que se refugiaban- pasaron a denominarse, por ejemplo, “fortines montoneros”. Y los lugares donde ponían a sus cautivos eran bautizados como “cárceles del pueblo”.
El triunfo de ellos hubiese significado, automáticamente, un alineamiento con Moscú.
II°) Interno: Al accionar de la subversión tricontinentalista colectivista totalitaria socialista (montonera, erpiana, faliana, ocpiana, etcétera) se sumaron el autoritarismo y el desgobierno característicos del peronismo.
El “movimiento” que tuvo por líder a un individuo que fue golpista en 1930.
El “movimiento” que tuvo por líder a un individuo que fue golpista en 1943.
El “movimiento” que tuvo por líder a alguien que fue “vicepresidente de facto” y que dijo que resignaría las palmas de general de la Nación para ser por siempre el “coronel del pueblo”, pero que terminó convertido en general de Ejército sin los avales formales correspondientes.
El “movimiento” que tuvo por líder a un individuo que destrozó la letra y el espíritu de la Constitución Nacional Originaria,
que hizo trizas el sistema republicano de gobierno,
que estatizó toda la economía,
que cerró un diario que era antorcha de libertad (“La Prensa”),
que convivió con una menor de edad en la UES,
que encarceló dirigentes opositores,
que al enemigo no le reservaba “ni justicia” y que le prometía “leña” y “alambre de enfardar”
y el individuo que, finalmente, comandó un régimen incendiario de templos y que prometió que caerían “5 por 1”.
Este corrupto y Gran Corruptor, republicida y liberticida, cuando cayó, partió al exilio, desde donde conspiró durante dieciocho años.
Y desde donde avaló la ejecución del general Pedro Eugenio Aramburu, alegando que “la violencia en manos del pueblo, no es violencia: es justicia”.
Este corrupto y Gran Corruptor, republicida y liberticida, volvió al país en medio de una balacera infernal producida entre “la patria peronista” y “la patria socialista”, quedando varios de sus exponentes colgados de los árboles.
El ministro del Interior era Esteban Righi, actual Procurador General de “la Nación”.
Este corrupto y Gran Corruptor, republicida y liberticida, había “bendecido” la candidatura del dentista Héctor J. Cámpora (hoy “referente” de la “nomenklatura” kakista).
En cuarenta y nueve días no sólo abrió las puertas de las cárceles por medio de indultos (el “Honorable Congreso” dictó, poco después, una amnistía), sino que no dejó desastre por hacer.
Podría decirse que un trapo rojo implícito flameó, durante un mes y medio, en la República.
Todo quedó preparado para que el corrupto, Gran Corruptor, republicida y liberticida; se presentara a elecciones con SU MUJER como compañera de fórmula.
Alrededor del SESENTA POR CIENTO de la ciudadanía, de los “argentinos y argentinas” de entonces, AVALÓ el regreso al poder de este individuo.
Pocos meses después, el corrupto, Gran Corruptor, republicida y liberticida, murió.
Y fue sucedido por SU MUJER, que estaba dominada por el Astrólogo, Mayordomo, Comisario General y Ministro de “Bienestar Social” José López Rega (a) “Hermano Daniel”.
Pero antes de morir, el corrupto, Gran Corruptor, republicida y liberticida decidió DESHACERSE de la subversión tricontinentalista colectivista totalitaria socialista –en especial de LA MONTONERA- a través de la creación de “un Somatén”.
Ese “Somatén” subtropical llevó el nombre de Triple A: Alianza Anticomunista Argentina.
Un “atajo” para garantizar la no intervención de las Fuerzas Armadas en el combate contra la subversión; porque, de ocurrir algo así, tendría que emplearse Una "lógica de guerra, NO convencional.
El Astrólogo quedó al frente de la Triple A y comenzó a perseguir a sus objetivos hasta eliminarlos.
Muchos de los “blancos móviles” fueron a pedir protección AL EJÉRCITO o a LA MARINA, temerosos de estos escuadrones de la muerte.
Mientras tanto, la subversión izquierdista seguía matando, secuestrando, poniendo bombas y hasta planificando la separación de una parte del territorio nacional en Tucumán, para establecer la “República Socialista de los Andes”.
En este contexto, el PEN decidió firmar una serie de decretos, primero de alcance provincial (territorio tucumano) y luego nacional (toda la República) con vistas a ANIQUILAR el accionar de los elementos subversivos.
La palabra ANIQUILAR es propia del lenguaje militar, tiene que ver con la acción bélica y no deja lugar a dudas.
Si se emplea se hace para ir a una guerra.
Este mecanismo, conviene subrayarlo, lo ordenaron Italo Argentino Lúder y María Estela Martínez (a) “Isabelita” en acuerdo general de ministros.
Esas órdenes JAMÁS CAMBIARON durante el “Proceso de Reorganización Nacional”.
Mientras todo esto ocurría el “Honorable Congreso” se limitaba a emitir declaraciones repudiando la violencia que asolaba al país pero no presentaba NI UNA SOLA PROPUESTA para darle un marco legal a la guerra contra la subversión.
Ni tampoco nadie hacía un “mea culpa” por haber levantado sus manos para dejar en libertad a peligrosos criminales que, ni bien salieron, persiguieron y hasta mataron a los jueces que los habían encarcelado.
Sin ningún tipo de protección o garantía, los magistrados no podían avanzar contra los agentes tricontinentalistas y su accionar luctuoso.
Con demandas salariales imposibles de satisfacer, inflación, desorden, corrupción e incertidumbre; comenzaron a aflorar, cada vez con mayor insistencia, las voces que pedían el fin del gobierno de la viuda del Gran Corruptor.
El único heredero del corrupto, Gran Corruptor, republicida y liberticida no era "el pueblo", sino "Isabelita".
A quien el sesenta por ciento de los "argentinos y argentinas" que acudieron a las urnas en septiembre de 1973 decidieron votar como vicepresidente sin tomar en consideración sus capacidades y aptitudes inexistentes para ejercer el cargo presidencial en caso del fallecimiento de su adorable esposo.

Salvo el Ingeniero Álvaro Carlos Alsogaray, no recuerdo A NINGÚN político de renombre y relevancia pública que se haya opuesto a la intervención militar, con motivos escritos y fundamentados.
Así llegó el 24 de marzo de 1976. 
En ese momento, con ocho años, recuerdo perfectamente la sensación de alivio por la caída del desgobierno peronista.
La impresión generalizada era que no se había tomado el poder, sino OCUPADO EL PODER, porque NADIE, objetivamente, gobernaba.
El comandante más antiguo de la Junta era el almirante Emilio Eduardo Massera, que llegó a la jefatura del arma POR DECISIÓN DEL PROPIO PERÓN, que pasó a retiro a varios almirantes que tenían orden de prelación.
Sobre él y sus relaciones estrechas con el peronismo, la logia Propaganda 2 y hasta los montoneros, se hablaría por años.
El teniente general Jorge Rafael Videla ocupó el doble rol de comandante-presidente (al que llamaban “cuarto hombre”).
Era de una familia radical de Mercedes, provincia de Buenos Aires, de ahí su buen diálogo (como el del general Viola) con la dirigencia radical balbinista.
El brigadier Orlando Ramón Agosti, finalmente, era el más nuevo de los comandantes, reemplazante de Héctor Luis Fautario, que pasó a retiro luego de la insurrección del brigadier mayor Orlando Jesús Capellini a fines de 1975.
Hoy en día se OLVIDA DELIBERADAMENTE este contexto. 
Y pienso que ello se debe a la forma en que las Fuerzas Armadas debieron retirarse del poder como consecuencia de la derrota en Malvinas.

Los políticos que cubrieron de elogios la intervención militar, que se desempeñaron como intendentes y embajadores, que fueron a cenar con Videla al Luna Park en 1980 (Vicente Solano Lima y dirigentes comunistas incluidos;
con radicales que tenían una mesa casi pegada a la del “cuarto hombre”),
que le regalaron carne a Galtieri para su asadito en Victoria (La Pampa) y que fueron volando a Malvinas para comprarse “souvenirs”...
Hoy no tienen NADA QUE VER con el “Proceso”.
Como tampoco actores, periodistas, escritores, cómicos y una enorme porción acomodaticia e irresponsable de LA SOCIEDAD ARGENTINA, que JAMÁS se hace cargo de lo que apoyó y de lo que apoya.
Como cierta pareja que se enriqueció con la Circular 1050 y que mantenía aceitados vínculos con las autoridades militares de Santa Cruz.
Desde 1983, gobiernos radicales, peronistas y “de coalición” vienen falseando y recortando los hechos.
Una forma, en varios casos, de encubrir pecadillos propios pasados e incompetencias presentes.

Ya no sabemos si el “terrorismo de Estado” comenzó en 1976 o en 1975.
Se “juzga” a los comandantes, pero SE EXCULPA a Luder y a “Isabelita”.
Se “indemniza” incluso a madres de subversivos que escaparon del país ANTES del 24 de marzo de 1976, pero no se reconoce a las víctimas de los crímenes cometidos, por ejemplo, por el hijo de la señora Vaca Narvaja Yofre.
La careta del 24 de marzo siempre es útil para cubrir el rostro de la inflación, la corrupción, la inseguridad, el embrutecimiento generalizado, la incultura cívica y la vulgaridad explícita. 
Sirve para disfrazar al Despotismo Electivo de “democracia”.
Sirve para transformar lo que Friedrich August von Hayek –lúcido pensador fallecido hace veinte años- llamaba “camino de servidumbre”, en una carretera sin salida hacia la esclavitud.
Por donde no tienen lugar para transitar la “Memoria”, la “Verdad” y la “Justicia”
Sino una Troika llevada a los tumbos por tres yeguas desbocadas: “Amnesia”, “Mentira” e “Injusticia”
Sumiéndonos en el pasado para no ver el presente.
Y que nos impide volver al futuro.

Carson Marsh / Facebook


(1) Como está todo dado vuelta, yo mismo invierto todo: La fecha, la foto... (Carson Marsh)

No hay comentarios: