Se buscan argumentos para el discurso de Cristina
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24)
Cierra la semana con un indiscutible protagonismo de la presidente Cristina Fernández (con una irrupción del panelista de 6,7,8, Orlando Barone que marcó "el silencio del año"), en dos inéditas conferencias de prensa.
Aunque en el exterior, ayer la mandataria se sometió a preguntas de estudiantes de la prestigiosa Universidad de Harvard, en Boston, y anteayer lo hizo en Georgetown, Washington. Pero en ambas ocasiones dejó un sabor más que amargo.
Para los estudiantes, estuvo más cerca de la sanata que de un verdadero relato.
Según el periodista Jorge Lanata, que estuvo en Harvard, la Presidente "se puso cínica y agresiva con los estudiantes", y dijo que "habla como si estuviera en un bar".
"Fue muy curiosa toda la situación. Había muchísima gente que no pudo entrar. Había mucha expectativa. Nos ofrecieron a los periodistas si queríamos entrar pero dijimos que no", contó Lanata por 'Radio Mitre'.
Lanata negó que los periodistas les hayan pasado preguntas a los estudiantes. "Esa fue la paranoia de Cristina.
Es increíble que haya sido una cuestión de Estado el hecho de que 5 o 6 estudiantes le pregunten a la Presidenta.
Cristina no soporta que le hagan preguntas, se enoja.
Ayer empezó dándole consejos al mundo y pareció que iba a tratar de evitar a hablar de Argentina.
Después se puso cínica y agresiva, dijo lo de la Universidad de La Matanza.
Habla como si estuviera en un bar y no es consciente de su rol. Es increíble", señaló.
"No se digitó quién preguntó. Ellos las cosas se las toman en serio.
La Presidenta se hizo la canchera y dejó un par de preguntas más. Gran parte del público era extranjera y no entendió nada. El tema es que están tan acostumbrados a no responder. Acá Cristina habló solo con CQC, un programa cómico, no periodístico", cerró Lanata.
En constraste, y para sorpresa de nadie, el periodista oficialista Víctor Hugo, también se refirió a la disertación, y opinó en cambio que los estudiantes de Harvard "estaban formateados".
Dijo que "el nivel de las preguntas eran recortes de diario" y tildó de "operación" la disertación de la Presidenta.
"Ayer se vio a chicos que la sacaban de quicio a la Presidenta, que estaban formateados, preguntando algo que es una opinión", reflexionó el periodista en el inicio de su programa de radio en Continental.
"Daba la sensación de que estaban muy nerviosos, con la angustia de una persona que no está viviendo eso con naturalidad, impulsados por el pedido de alguien que le transmitía las preguntas", agregó.
El discurso de defensa prosiguió:
"El nivel de las preguntas eran recortes de diario, no se inspiraron. Fue penoso. Fue desolador y me entristeció mucho ver el miedo de algunos de los alumnos".
En el inicio del programa, el periodista entrevistó a una joven de 30 años, ex estudiante de Harvard, que estuvo en el auditorio durante la exposición de Cristina.
Lucía, como fue identificada, criticó a sus compañeros de la universidad y dijo que le pareció "lamentable el papel que hicieron los argentinos ahí".
"El nivel de las preguntas era el de un taxista que leyó el diario Clarín de esta mañana.
Uno esperaba preguntas más interesantes.
Se desaprovechó una oportunidad. Le podrían haber hecho a la Presidenta muchas preguntas interesantes", dijo la joven convocada por Víctor Hugo.
Uno de las respuestas más polémicas de Cristina ayer, fue a un estudiante que le pidió "una autocrítica", tras los índices poco transparentes de delincuencia e inflación.
La respuesta textual, estuvo más cerca de lo que relató el primer periodista mencionado:
"Primero te voy a contestar, porque no se lo contesté a tu anterior compañerito, sobre el tema de que "soy uno de los pocos privilegiados".
Chicos, estamos en Harvard, por favor, esas cosas son para La Matanza, no para Harvard.
Esta frasecita, "soy uno de los pocos argentinos privilegiados".
Mirá, será porque están acá en Harvard y no se enteran, yo hablo con millones de argentinos en los 20.000 actos a los que voy, hablo con periodistas en Formosa, en Córdoba, en donde me encuentren y en realidad no sé de dónde han sacado esto de que no hablo realmente, que parezco muda.
No es así, habla mucha gente conmigo.
¿A vos te parece que si la gente no hablara conmigo yo hubiera sacado 54% de los votos?
¿Hubieran votado a una muda o alguien con quien nunca hablaron?
Son chicos inteligentes, tiene nivel académico, yo creo que no pueden repetir monocordemente lo que escriben dos o tres periodistas que además, a ver, vamos a empezar a hablar un poquito en serio de lo que está pasando en la Argentina en materia de medios de comunicación, que han dejado de ser medios de comunicación para convertirse en medios de oposición.
Si quieren hablar de periodismo vamos a hablar en serio de periodismo y de medios de comunicación, y de regulación en materia de medios de comunicación.
Ustedes viven en Estados Unidos donde hay una fuerte regulación en materia mediática.
Por ejemplo, en Estados Unidos nadie que sea propietario de un medio escrito, el dueño del New York Times o el dueño del Washington Post puede ser titular de licencias de televisión o de audio, mucho menos ser el único dueño de la única fábrica de papel de diario, y además hay un determinado número de licencias que pueden tener en materia de radios, en materia de televisión o en materia de comunicación.
Hace tres años exactamente, y esto creo que en la escuela de leyes y la escuela de gobierno es algo muy importante...
Les pido ahora a todos ustedes que levanten la mano los que saben si se ha sancionado una nueva ley de medios en la República Argentina.
Quiero que levanten un poco más alto la mano para que pueda verlos, deben ser muy poquitos evidentemente.
En el año 2009 se sancionó, se van a cumplir tres años de la sanción de la ley de medios que establece que no puede haber más de 24 licencias de cable y un número creo que de cuatro -no recuerdo- de frecuencia abierta.
Y realmente hay en la República Argentina una gran controversia porque el monopolio mediático que existe en la Argentina, que no solamente controla la fábrica de papel de diario obtenida durante la dictadura, que además controla muchísimos diarios, se niega a cumplir una ley sancionada por el Congreso desde hace tres años, con medidas cautelares, y finalmente la Corte ha fallado y ha determinado que el 7 diciembre tiene que estar desinvertido porque no se pueden tener 240 licencias de cable y nueve licencias abiertas porque obviamente hay monopolio.
Esto se llama la Escuela de Gobierno Kennedy, si hay algo que ha caracterizado a esta sociedad es ser una sociedad con normas muy antimonopólicas y anti trust, de hecho Microsoft, una de las empresas más grandes del mundo, ha sido muchas veces multada por desempeño monopólico.
En la República Argentina estas cosas no pasaban, la ley de medios de sancionó además con una participación nunca vista.
Como se ve que muchos no la conocen quiero explicarles que es la primera ley que se envía al Congreso luego de realizar un anteproyecto.
Yo presenté un anteproyecto, que tampoco fue un anteproyecto que realizara yo, fue una coalición democrática que agrupaba a numerosas organizaciones no gubernamentales, sindicatos, universidades, intelectuales, que formularon un anteproyecto.
Este anteproyecto de ley se discutió en más de 25 foros, universidades, sindicatos, a lo largo y a lo ancho del país. Se hicieron inclusiones, modificaciones y finalmente se mandó el proyecto de ley al Parlamento que resultó aprobado por amplias mayorías, que no solamente fueron de mi partido sino también de partidos de la oposición.
Establecía determinadas cláusulas de adecuación para precisamente evitar los monopolios, que en realidad es lo peor que le puede pasar a una sociedad, que un solo sector económico...
Porque además el periodismo no es ya como lo ejercía Benjamin Franklin o Mariano Moreno a la luz de las velas, hoy son todas empresas económicas.
(...)
Hay en nuestros días, hablando de libertad y periodismo, no sé si lo sabrán pero hay varios periodistas procesados por la Justicia argentina junto a ex agentes de inteligencia, junto a ex jefes de la SIDE, junto a generales de la nación, que hackeaban, como pasaba con Murdoch, que interceptaban mails y comunicaciones telefónicas y utilizaban esto para presionar vender información.
Hay 7, 8, 9 ó 10 personas, entre ellas conocidos y connotados periodistas.
Es curioso que no haya llegado una información de esta naturaleza a una universidad tan importante como Harvard, pero se los quiero comentar porque esto ha pasado y creo que debemos tener sensatez.
Quería decir que realmente el problema que hoy radica es esto, o sea hay libertad absoluta, tanta libertad hay que existe un monopolio que no acepta la ley y no reconoce la autoridad de aplicación que votó el Congreso y que ha reconocido hasta la propia Corte Suprema de Justicia la Nación.
Por eso quería decir esto, para los que no conocían la existencia de esta regulación en la Argentina, que en realidad todavía estamos muy atrasados respecto de lo que es Estados Unidos en materia de libertad de expresión, porque la libertad de expresión la podés ejercer en la medida que puedas tener lugares donde expresarte y que no todos los lugares pertenezcan a un solo medio.
También uno lo puede ver cuando aquí ve cómo toman partido determinadas cadenas mediáticas por tal o cual candidato, por tal o cual política del gobierno.
Lo cual no está mal, yo no creo en la objetividad del periodismo, creo que el periodismo debe tener opinión, cada uno de nosotros mira el mundo de algún lado, desde alguna ideología, desde determinados intereses.
Pero no sos uno de los pocos argentinos, tal vez porque vivís acá en Harvard, obviamente, vas a hablar poco conmigo porque yo a Harvard no vengo, pero te puedo asegurar que hay millones de argentinos que hablan con esta Presidenta constantemente, sería tonto pensar otra cosa, hablo con periodistas, con sindicalistas.
Pero lo que pasa es que me parece que periodismo se ha convertido en la Argentina en algo muy autorreferencial.
A mí me llama la atención venir a una universidad y estar hablando de eso, no vine a una escuela de periodismo, vine a una escuela de gobierno y yo soy Presidenta, y me llama la atención poderosamente que todo gire en torno a si hablo o no con tal o cual periodista.
Realmente me parece, si me permiten, poco académico, esperaba realmente algún otro tipo de análisis o algún otro tipo de preguntas que tuvieran que ver más con el gobierno y con la escuela de gobierno, que creo es el tema lo que los ocupa a todos ustedes.
Quedate tranquilo que hablo con un montón de gente.
¿Qué es lo que querías saber, me podés repetir la pregunta?
-Quería saber si podía empezar a haber una autocrítica y permitir más este tipo de conferencias donde pueda expresarse un poco más claramente con preguntas.
-Yo te digo que mis funcionarios hacen conferencias todos los días, casi todos los días hay un funcionario explicando, desmintiendo y demás.
Pero en realidad también llega un momento en que uno dice una cosa, publican otra, en realidad fijate, voy a leer un titular de un diario después de mi discurso del otro día en la en la ONU.
Al otro día que yo hablé sobre el tema de AMIA salió un titular de un diario donde dice "fuerte giro de la Presidenta, negociará con Irán por la AMIA".
Yo venía hablando de diálogo con la AMIA en los discursos que di en la ONU en el 2009, en el 2010 y en el 2011, lo que pasa es que el diario el día anterior había puesto otro título, había puesto que yo no iba a hablar con Irán, entonces tuvieron que cambiar el título y poner que yo había girado, en realidad yo venía diciendo exactamente lo mismo.
Y la verdad que uno está en la Argentina, habla y por ahí dice blanco, pero no ya en conferencia de prensa, estoy hablando, digo blanco y al otro día sale publicado que la presidenta dijo negro.
Y eso se puede verificar totalmente. Yo creo que hay una percepción y una toma de posición respecto de muchas cosas, pero quedate tranquilo porque hablo con todo el mundo.
La última conferencia que di creo que fue cuando estuvo Hillary Clinton en la Argentina. Pero estar dando conferencias todos los días no me parece que sea la obligación de la presidenta, yo tengo que gobernar, conferencias dan mis funcionarios. Mis funcionarios hablan todos los días, el ministro del Interior, el ministro de Economí...
Aacabo de ir el viceministro de Economía Axel Kicilloff a responder todas las preguntas sobre presupuesto...
El titular de la AFIP da conferencias de prensa permanentemente;
el ministro del interior da conferencias de prensa permanentemente;
el ministro de Planificación también.
Ahora esto me parece que es un latiguillo, una muletilla, yo creo que puede haber muchísimas críticas que hacer, pero me parece que no encuentran el lado por donde quieran criticarme y entonces sea esto, pero sinceramente me llama la atención.
No me enoja, te aclaro, porque a esta altura no me enoja, además enojarse hace mal a la salud y te salen arrugas, no vale la pena, paciencia y seguir adelante. Muchas gracias querido. "
Largo, pero este fue uno de los momentos más tensos del encuentro de ayer, al que Cristina Fernández ingresó pidiendo hablar del mundo y no de la Argentina en particular, para terminar haciendo referencia a 'Clarín'.
Al que llegó una hora tarde, como dijimos, y arrancó mal porque le echó la culpa al tránsito y tráfico newyorkino...
Corrigió frente a los estudiantes al moderador quien erróneamente había dicho que Eva Duarte de Perón fue presidente y dijo mal la fecha de nacimiento de la Presidente...
Usó la vieja táctica de las asambleas estudiantiles: agotar el tiempo y que no reste mucho para preguntas, aunque no lo logró porque preguntar, preguntaron igual.
No hubo hilo conductor en su relato.
Acaso, ¿fue pura improvisación?
¿Harvard no merecía otra preparación? ¿Por qué llegar a la "ensalada"?
Si acaso
las preguntas eran tan "básicas", ¿por qué le resultó tan difícil contestar, por
qué intentó evadirlas, y por qué respondió con frases del tipo: soy "una abogada
exitosa y una presidente existosa" para justificar su enorme fortuna? (Dato que
la mayoría conoce: Cristina casi no ejerció su profesión)
¿Cómo puede entender que a un relato al que no se le niegan recursos, no se
le puedan encontrar argumentos?
El gobierno de Cristina triplicó desde 2008 las direcciones en la
Secretaría de Comunicación Pública que controla el jefe de Gabinete, Juan Manuel
Abal Medina: aumentaron de 9 a 27.
Y la partida de contratos temporarios se
duplicó y más -subió un 123,5%- desde enero hasta junio últimos: de $ 13,6
millones pasó a 30,4 millones.
Todo eso ocurrió en un contexto de fuerte aumento
en el gasto en la promoción de las políticas y de la figura de la Presidente.
Por ahora, en 2012 el Gobierno gastará en ese objetivo $1492,5 millones: 903,7
millones en Fútbol para Todos, por donde se emiten los spots oficiales, y 588,8
millones en la partida de "publicidad y propaganda" en diversos medios de
prensa.
En agosto ya se habían consumido $ 492 millones en publicidad, el 99,75% del
presupuesto original aprobado por el Congreso, según el diario 'La Nación'.Por eso hace un mes se reforzó la partida en 95 millones y se la dejó en $ 588,8 millones.
En 2011, un año electoral, ese gasto había sido de $ 470,8 millones. En 2010 llegó a $ 255,7 millones.
Pero a un ritmo del gasto de $ 61,5 millones por mes en propaganda, le faltarían unos 246 millones, proyectados, para este año.
Todo esto surge de un informe de auditores del Estado, publicado por la página www.elauditor.info, que edita la Asociación de Personal de Organismos de Control (APOC), basado en datos oficiales, y que fue difundido hace unas semanas por el mencionado matutino.
Los 17 mensajes por cadena nacional que Cristina hizo en lo que va del año pusieron en el centro de la escena la política dirigida a controlar el discurso y el relato en los medios de comunicación, la prioridad confesada por la Presidente.
"Uso la cadena nacional para informarles a los argentinos las cosas que les quieren ocultar", dijo.
El salto en el gasto en contratos temporarios entre enero y junio, de 13,6 a 30,4 millones de pesos, supone que de unos 150 sueldos se pasó a unos 330, si se los calcula sobre la base de $ 7000 de salario promedio.
El presupuesto global de la secretaría aumentó también desde enero.
De $ 589,7 millones se reforzó a 706,2 millones.
Pero la partida de publicidad aumentó a 588,8 millones, que sumados a los 903,7 millones de Fútbol para Todos, suma un total de 1492,5 millones en la difusión de la imagen presidencial.
Representa el 42% del presupuesto total de la Jefatura de Gabinete para 2012, $ 3533,6 millones.
Fútbol para Todos gastó hasta agosto $ 638,2 millones, el 91,34% de su partida original de 698,7 millones. Por eso se le reasignaron 205 millones hace un mes y podría ampliarse en unos 100 millones más para terminar el año.
Si se redireccionan $ 150 millones más en publicidad, la suba del gasto total en propaganda oficial podría elevarse en 250 millones a los 1492 millones pautados: podrían superar así los 1740 millones.
En 2008, la entonces Secretaría de Medios disponía de 3 subsecretarías y 9 direcciones. Al día de hoy se triplicaron las direcciones: 27.
El área que más creció fue la Subsecretaría de Comunicación Pública, con 12 direcciones (10 de ellas nuevas), a cargo de Rodrigo Rodríguez, apodado "Rodra".
Allí se cobijó la militancia de La Cámpora.
Se trata del área que gestiona la pauta publicitaria: la "caja" de la secretaría.
Se le adjudica a "Rodra", de línea directa con el jefe de La Cámpora, Andrés "Cuervo" Larroque, amigo de Máximo Kirchner, la decisión estratégica del destino de la pauta publicitaria oficial.
En una proporción mayoritaria se destina a medios afines con el kirchnerismo, algo que también coordina con Scoccimarro.
Su repartición contiene una multiplicidad de direcciones, cuyos titulares pocos conocen, con una rica diversidad de nombres:
Gestión de la Comunicación Pública;
de Monitoreo y Estrategia;
de Coordinación Institucional;
de Supervisión Operativa; de Dirección Estratégica,
o la de Relaciones Institucionales, que interactúa con ONG, organizaciones sociales y de Derechos Humanos.
La Subsecretaría de Comunicación y Contenidos, de Gustavo Russo, contiene 13 direcciones (siete de ellas son nuevas) dedicadas a organizar y difundir los actos de la Presidencia, la relación con los periodistas, la disposición de las cámaras y el audio y las subidas de la señal al satélite para que sea tomada por los diversos canales de televisión.
También contiene a las direcciones dedicadas a la producción gráfica de avisos para medios escritos y a la elaboración audiovisual de los spots y placas para televisión, radio y Fútbol para Todos.
Por su parte, la Subsecretaría de Gestión Administrativa, de Juan Ross, agrupa a dos direcciones, una de ellas nueva, y una delegación, dedicadas a la administración pura del área y al departamento de legales.
Además, la Secretaría de Scoccimarro también comprende a la empresa Radio y Televisión Argentina RTA Sociedad del Estado, que dirige Tristán Bauer, compuesta por Radio Nacional, Canal 7 y la agencia Télam. También supervisa la Autoridad Federal de Radiodifusión, que comanda Santiago Aragón.
Pero pese a semejante gasto y estructura, todo resultó inútil...
Cristina terminó ayer mezclando La Matanza con Harvard, y provocando "dolor" hasta en el rector de la Universidad argentina: "fue una frase desafortunda, no le encuentro otra explicación", afirmó Daniel Martínez, y cerró "tenemos muchas limitaciones, a la Universidad vienen chicos muy humildes, pero eso no quita que sean tan inteligentes como otros".
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