Hay heridas que nos han marcado.
Aquellos que nos podrían haber ayudado han pasado de largo ignorando nuestras necesidades.
Y a estas heridas las hemos escondido y sepultado en lo más profundo de nuestro ser, detrás de barreras que nos hemos creado para protegernos.
Estas barreras impiden la comunicación y la apertura, nos traban para establecer relaciones sanas.
Es necesario que esas barreras comiencen a caer para que podamos ser verdaderamente libres, es decir, verdaderamente humanos.
Jean Vanier, Acoger nuestra humanidad 148
Boletín Info-RIES nº 1102
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*Ya pueden disponer del último boletín de la **Red Iberoamericana de
Estudio de las Sectas (RIES), Info-RIES**. En este caso les ofrecemos un
monográfico ...
Hace 3 meses
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