Resulta
que la UNESCO (United Nations Educational, Scientific and Cultural
Organization, es decir Organización de las Naciones Unidas para la Educación,
la Ciencia y la Cultura) ha sometido a votación de sus miembros la cuestión de
si el Muro de los Lamentos tiene o no algo que ver con el judaísmo…
La votación fue
favorable al NO.
Es
decir que ese muro no tiene nada que ver con el judaísmo.
Pero
según la tradición judía, y hasta donde yo sé, el Muro es un vestigio del
Templo de Jerusalén.
El
segundo Templo, en realidad.
Yo
no soy un entendido en estos temas, pero, por estudios arqueológicos y demás, este
Muro data de los primeros años de la Era Cristiana y el llamado Monte del
Templo del Rey Salomón, que es muy anterior, estaba en el mismo lugar.
Al
menos eso es lo que he leído por ahí.
Yo
pregunto, con la mayor bonhomía:
¿Es
posible someter a votación de un grupo de funcionarios de la UNESCO un hecho
que simplemente requiere comprobación histórica a cargo de profesionales de la
arqueología y ramas aledañas?
No
quiero ni defender ni negar ni afirmar nada, solo me pregunto si es posible
someter a votaciones de quienes fueren los hechos históricos que simplemente
requieren corroboración.
Y
si tal corroboración no es posible, lo lógico sería dejar las cosas como están.
Muchas
cosas en esta vida jamás han sido comprobadas, pero de allí a negarlas por
votación de un organismo que supuestamente se encarga de la Educación, de la
Ciencia y de la Cultura, a mí, por lo menos, me parece
bizarro.
¿No estamos una
vez más ante un hecho político que más bien es una provocación que otra cosa?
Héctor
Blas Trillo
No hay comentarios:
Publicar un comentario