En
la década del 90 tuve la ocasión de trabajar en Londres y allí me decían que
estaban muy preocupados por lo que estaba ocurriendo con el crecimiento
demográfico de las familias musulmanas.
De
ninguna manera abrían juicio sobre lo bueno o malo de la religión, son muy
abiertos en ese sentido, pero dijeron "no es nuestra cultura".
Y
en poco tiempo, en la elección de Londres en 2016, directa y no indirecta,
salió el primer musulmán mayor de Londres.
Alrededor de Londres, todas las
comunas en estos momentos están en manos en musulmanes.
¿Qué
pasa con ésto?
Que
los colegios elementales disminuyen y las madrasas aumentan.
Y
vean lo que pasa con un país con la cultura como la inglesa, donde en las
madrasas se enseña el Corán.
Esta
es la proyección de lo que pasaba en los 90 y quiero decirles qué nos va a
pasar a nosotros si no hacemos algo.
Con
la asignación de planes en el tercer mes de gestación, el embarazo adolescente
se incrementó significativamente.
En
algunos hospitales se quintuplicó la atención.
Y
cuando tienen la subvención, al año siguiente tienen otro embarazo para tener
otra subvención.
No
se les puede echar en cara nada porque necesitan plata y no la tienen, y ahí
está el problema.
Hay
un libro que dice que no hay hijo que tenga menos posibilidades que aquel de
madre adolescente con escasa educación.
El
50% de esos niños serán delincuentes.
Yo
fui a visitar la villa y realmente me sentí muy mal.
Fui
a La Cava, llevé psicólogos, sociólogos, expertos en nutrición.
Empecé
a hablar con los chicos de allí y les ví los dientes marrones…
Eran
dientes marrones en pleno San Isidro, y eso porque no tenían calcio.
El
coeficiente intelectual de esos chicos era realmente bajísimo y yo pensé:
Este
chico no pidió venir acá, no tiene los mismos derechos que mi nieto, nadie lo
defiende y es realmente una aberración que pase ésto.
Lo
hablé con el intendente Posse y le dije que ésto no podía durar un día más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario