Por Darío Gallo
La preocupante inclinación oficial de escrachar no sólo al periodista sino también a sus familiares.
¿Qué sigue?
Ataque a la prensa, Cristina Kirchner
El ataque de la presidenta de la Nación contra el periodista de Clarín marca su propio récord.
Ya no sólo Cristina Kirchner trata de desprestigiar a los periodistas en un periodista, sino que también va por sus familias.
Si bien es incomparable, lo de ayer hace recordar el concepto que vomitó un gobernador bonaerense durante la dictadura.
En aquella época, el enemigo eran "los subversivos", pero Saint Jean aclaró que irían después por "sus amigos, después a sus familiares, después a los indiferentes y, por último, a los tímidos".
En otro ámbito institucional, pero con la misma lógica, la presidenta empezó ayer por la esposa de Bonelli.
¿Qué le molesta tanto al Gobierno y su conductora?
No son las opiniones, las críticas de la oposición o de los periodistas.
Al Gobierno, pero en especial a Cristina Kirchner, le molesta la información.
La información pura y dura.
La irrita de un modo inimaginable que sus manejos y maltratos a los funcionarios no queden detrás de los muros del Palacio.
¿Cuál fue el pecado de Bonelli esta vez?
Contar en Clarín lo que nadie contó sobre cómo Galuccio estuvo a punto de renunciar cuando se enteró tarde y mal de un decreto que le recortaba sus funciones.
A la Presidenta también le molesta, y no lo puede decir, que la prensa adicta que generó con millonadas de dinero público sirva solo para elogiarla y atacar a los opositores... pero sin lograr una audiencia que pueda competir con la prensa que no depende del Gobierno.
Parece innecesario decirlo, pero la trayectoria periodística de un periodista, de un diario o de una radio excede la coyuntura.
Y el público suele reconocer la coherencia cuando busca información de primera, cuando busca aquellas noticias que el poder suele querer ocultar.
El escrache a un periodista no alineado a los deseos del gobernante es grave.
Y debe preocupar a la mayor parte de la sociedad.
Porque hoy el ataque es a Marcelo Bonelli y su familia, pero mañana pueden serlo todos.
Incluso "los indiferentes y los tímidos..."
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El periodista Marcelo Bonelli le respondió a la Presidenta
Cristina lo había acusado de hacer “una campaña para perjudicar la imagen de YPF” por cadena nacional. “Busca amedrentar a través del escrache”, respondió el periodista
El periodista Marcelo Bonelli le respondió anoche a la presidenta, Cristina Kirchner, luego de que lo acusara por cadena nacional de emprender “una campaña para perjudicar la imagen de YPF”.
El comunicador dijo que la Presidenta busca “amedrentar a través del escrache” y que “los periodistas no publiquen información”.
Ayer, desde la destilería de Ensenada, la Presidenta cuestionó duramente a la prensa y tras pedir que se sancione una “Ley de Etica Pública” para los periodistas, nombró directamente a Bonelli y aseguró que durante los últimos cuatro años de gestión de Repsol “su mujer y un socio” recibían “240 mil pesos por año en concepto de servicios que no sabemos si son periodísticos”.
Al mismo tiempo, pidió que se cree una norma para “saber si quienes manejan la información pública reciben dinero de alguna empresa”.
Más tarde, Bonelli le respondió a la Presidenta:
“Todos mis ingresos están en blanco y declarados en la AFIP”, en declaraciones televisivas.
Y aseguró que se busca "amedrentar a través del escrache" y "que los periodistas no publiquen información".
El periodista ratificó sus dichos del 3 de agosto, cuando aseguró que el director de YPF Miguel Galuccio analizaba renunciar, molesto con un decreto de que establece la regulación del mercado petrolero.
Al mismo tiempo, explicó: “Mi esposa realizó tareas en YPF a fines de 2007 desarrollando su profesión de profesora nacional de inglés. Para la Presidenta eso, trabajar, es un delito”.
Y agregó:
“La intención es sembrar dudas, desacreditar, tratar de desvirtuar una información certera, tratando de sembrar el desprestigio”.
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